José Guadalupe Torres asegura que el programa Salas de Lectura en Coahuila ha tenido avance significativo, pero todavía falta.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Formar una Sala de Lectura puede parecer algo fácil, pero en realidad no lo es, se necesita de mucho apoyo de gente voluntaria que quiera fomentar en otros el gusto por la literatura. Pero, ¿qué es una Sala de Lectura?
Para empezar, es importante que las personas sepan cuáles son las características de estos lugares, que pueden ser desde una escuela, un centro cultural y hasta una empresa o el hogar de alguna ama de casa... la lectura es posible en cualquier parte.
Las Salas de Lectura son espacios dotados con libros variados, atractivos y de calidad, en los que un grupo de personas coordinado por un promotor capacitado leen, comentan y disfrutan la lectura, a través de diversas actividades y del préstamo a domicilio de los libros.
La dinámica de una Sala de Lectura se compone de varias actividades y para explicar la manera cómo funciona, José Guadalupe Torres Sánchez -coordinador estatal de las Salas de Lectura- informó que en estos lugares se prestan libros, se lee en voz alta, se hacen narraciones orales, se escribe, se platica y se reflexiona a partir de la lectura de textos muy variados en cuanto a género, temática y tratamiento, “y además se propicia la libertad de expresión y elección, el respeto de la voz de todos en un ambiente agradable y además se hace uno de más amigos, si en un principio tenía diez, hoy ya tengo ciento veintitantos”, comenta entre risas.
El encuentro
José Guadalupe Torres está de visita en La Laguna por un motivo muy especial: el Primer Encuentro Estatal de Coordinadores de Salas de Lectura.
En Coahuila existen 172 salas de lectura y un total de seis mil 880 personas que asisten a ellas, lo que da un promedio de 40 personas atendidas por sala de lectura al mes.
Ésta es una loable labor, ya que el fomento a la lectura siempre ha sido uno de los puntos más importantes y de los más difíciles de atacar en cuanto a la cultura, aunque comenta Torres que en un mismo Estado existen diferencias: “hay diferencias, por ejemplo en la región Centro del Estado existen mayores alternativas de llegar a la gente, hay librerías, bibliotecas, actividades en centros culturales relacionadas con la lectura y muchas opciones más, pero hay lugares como la región Norte y la Carbonífera, en donde hay que fomentar con más fuerza, hay que abrir espacios, hay lugares muy alejados que no tienen las mismas oportunidades de acercamiento con los libros”.
El objetivo primordial del Programa Nacional de Salas de Lectura ha sido el de propiciar los encuentros gratificantes y significativos de las personas con los libros, a través de la creación de espacios de lectura alternativos a las escuelas y bibliotecas.
Entonces compartir la lectura, hacer que los libros circulen y que las personas encuentren en su colonia o en algún otro lugar no formal, un espacio en el que puedan pasar la tarde leyendo para sí y para los demás, en ambientes libres y amenos, abriendo las puertas de la percepción al placer de leer. Ésa es la esencia de las Salas de Lectura.
Es por eso que este Encuentro de Coordinadores de Salas de Lectura es importante, y además al reunirse, los coordinadores pueden intercambiar propuestas, hacer diagnósticos y convivir en un ambiente literario, este tipo de encuentros son como el semillero de las personas que fomentan la lectura.
LA PARTICIPACIÓN DE LA MUJER
Algo que llama la atención, es que la mayoría de las personas que coordinan una Sala de Lectura son mujeres: amas de casa, maestras, profesionistas y demás.
Torres comenta que esto se atribuye a diversos factores, por ejemplo a que las mujeres son las que tienen mayor tiempo disponible: “los hombres, por lo general, pasan el día fuera de su casa, no tienen mucho tiempo, sin embargo ya habíamos pensado en esto, y estamos planeando un proyecto que no sólo incluye a los padres de familia, sino a la familia completa, es un proyecto de lectura en familia, porque yo sostengo que en el hogar se forma lo bueno y lo malo, y el hábito de la lectura no sería la excepción.
El programa que proponemos para llegar a toda la familia es como el de algunas religiones que van casa por casa -comenta divertido-, tenemos previsto comenzar con la primera fase en el mes de noviembre en la ciudad de Saltillo, el voluntario irá casa por casa y repartirá un libro gratuito, después se recogerá y se intercambiará por otro, así la familia tendrá acceso a varios textos en su propia casa”.
EL CAMBIO DE ADMINISTRACIÓN
José Guadalupe Torres comenta en relación al cambio de administración, que “yo sólo tengo dos o tres peticiones. Entre ellas, que haya un apoyo afectivo hacia el proyecto, moral, que cada región lo tome como propio, y que se mantenga.
Además también es importante que nos apoyen con recursos económicos, esto para poder incrementar el número de salas, y que esto se mantenga en forma indefinida porque es un proyecto que va muy al fondo de las comunidades, tenemos cobertura en 24 municipios del Estado”.
El encuentro concluye el día de hoy, pero las Salas de Lectura quedan abiertas para todos, asista y conozca el placer de la buena lectura. Mayores informes en el Instituto Coahuilense de Cultura (Icocult) Laguna, o en los teléfonos 712-46-00 y 712-46-05.
Compromiso
¿Qué compromisos adquiere un coordinador de sala de lectura?
-Instalar la sala de lectura en un espacio accesible para los participantes.
-Realizar actividades de fomento de la lectura cuando menos una vez por semana, durante dos horas continuas.
-Ofrecer el servicio en forma gratuita y continua.
-Facilitar el préstamo a domicilio de los libros.
-Enviar trimestralmente un reporte de trabajo al instituto de cultura o consulado de su Estado.
-Asistir a capacitaciones complementarias y a encuentros con otros coordinadores para intercambiar experiencias y retroalimentar su trabajo.
Sus favoritos
El coordinador José Guadalupe Torres Sánchez comenzó a leer gracias a su abuela sobre la vida de los santos y éstos son algunos de sus libros predilectos:
El primero que leyó: La Vida de Santo Domingo Sabio.
A los seis años leyó: Las Mil y Una Noches y los cuentos de hadas.
El que más lo impactó: Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez.
Lo conmovió: Corazón, Diario de un Niño de Edmundo de Amicis.
Lo cautivó: Pedro Páramo de Juan Rulfo.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
El personal
Mucha gente se pregunta quién puede ser coordinador de una Sala de Lectura y no hay mayores requisitos que ser una persona que lea y demuestre interés en la formación de lectores, así como compromiso y posibilidades reales para instalar y coordinar de manera voluntaria y gratuita una sala de lectura en su comunidad.
Puede ser un padre de familia, un maestro, un bibliotecario, un compañero de trabajo, un estudiante, un escritor, un editor o un librero; profesionales en la promoción de la lectura, talleristas en el campo de las letras, entre otros.
