La nicotina produce lesiones en la oxigenación y pulmones, además daña las neuronas.
Citlalli Zoé Sánchez |
El Siglo de Durango
Falta control por parte de las autoridades para que las tiendas no vendan cigarros sueltos a menores de edad, remarca Roberto Escárcega Montañez, director de Centros de Integración Juvenil (CIJ).
De acuerdo con un estudio realizado por CIJ, la región norte del país (donde se incluye Durango) tiene un número mayor de fumadores que el Centro y el Sur. Además, el 26.6 por ciento de los fumadores cursa la educación secundaria, luego un 23.4 por ciento está en la preparatoria y le siguen niños de primaria.
Dado que son los adolescentes los que presentan un importante índice del consumo de cigarros, el entrevistado comenta que eso afecta su rendimiento escolar. “La nicotina te produce lesiones a nivel de la oxigenación, a nivel de los pulmones y daña las neuronas del sistema nervioso central”, alerta.
Dentro de la población que es tratada por los CIJ en Durango, Escárcega Montañez expresa que han podido constatar que acceden de manera fácil al tabaco en cualquier tienda. “Las edades de los muchachos fluctúan entre los diez y 18 años de edad, pero ninguno nos ha dicho que se les ha negado la venta del cigarro suelto; entonces, no hay ninguna autoridad que esté normando a los establecimientos”.
“Está descuidado, hay una normatividad y las autoridades lo están llevando a cabo pero no hay un inspector siempre oportuno para estar revisando si se vende adecuadamente el cigarro, pero los jóvenes nos dicen que la venta del cigarro es libre, no hay ninguna prohibición”, reitera.
Por cada cinco hombres que fuman hay una mujer. “La distribución de hombres fumadores en población urbana según la edad de inicio refleja que un diez por ciento es de menos de diez años, un 43.8 se inicia entre los 11 y 14 años de edad y el 46.1 entre 15 y 17 años”, detalla.
En las mujeres la edad de inicio varía: el 47.7 por ciento empieza a fumar entre los 11 y 14 años y el 52.3 por ciento comienza entre los 15 y 17 años, según da a conocer el servidor público.
De acuerdo con el número de cigarrillos que consumen las personas, el 86. 5 por ciento fuma de uno a cinco cada día, el 6.8 por ciento de seis a diez y el resto, entre 11 a 20.
El entrevistado explica que la población radicada en la zona norte del país está propensa a un mayor consumo de tabaco en gran parte por la influencia que ejerce Estados Unidos de Norteamérica y debido a la migración.
“En comparación con otras regiones, la región Norte tiene una prevalencia de fumadores de 28.4 por ciento, contra el 27.6 por ciento del Centro y el 16.2 por ciento del Sur”, manifiesta.
Si se logra que los jóvenes no consuman las drogas de inicio como lo son el tabaco y el alcohol se evitará que accedan a otras drogas ilícitas, tales como la marihuana o bien las sintéticas que cobran auge en la entidad.
El tabaquismo es un problema serio, sobre todo porque la sociedad en general no tiene el suficiente conocimiento de los daños que produce. “Consideran que es una droga de estatus, que da presencia y que daña el cuerpo a la larga pero cada vez hay más pacientes con cáncer de mama, de pecho y alteraciones de tipo cardiovascular en los jóvenes entre 30 y 35 años y quizás un poquito más para abajo”, indica.
Escárcega Montañez revela que partir de ayer iniciaron la campaña nacional en contra del tabaquismo con el Conalep con el objetivo de disminuir el consumo del tabaco entre la población de este plantel educativo. La meta es firmar un convenio con el subsistema de Colegios de Estudios de Ciencia y Tecnología del Estado de Durango (Cecyted), así como con los Colegios de Bachilleres.
Unen esfuerzos
José Ramón Enríquez Herrera, secretario de Salud, anuncia la creación de la Clínica de Adicciones, la cual estará ubicada en el Hospital de Salud Mental “Dr. Miguel Vallebueno” unido a las villas que se construirán para la implementación del modelo Miguel Hidalgo.
Comenta que de cada 100 niños, cinco ya han probado la droga, de allí la importancia de fortalecer las líneas de acción para contrarrestar los efectos nocivos de la farmacodependencia. Declara que en este año iniciará la construcción de dicho espacio.
Tras resaltar que Durango empieza a reconocer que existen problemas derivados del consumo de drogas, entre ellas el tabaco y al alcohol, dice que es importante que todas las dependencias unan esfuerzos para combatir esta situación.
“La Secretaría de Salud hace su parte, pero no es suficiente. Hemos visto lo importante que era la creación de un Instituto Estatal de Salud Mental y que nos va a permitir trabajar no solamente en adicciones, sino en otros temas importantes”, señala.