Aquellos que fuman, duermen mal durante la noche y tienen momentos de vigilia nocturna.
México, (Notimex).- Un estudio realizado por las Clínicas de Trastorno del Sueño y Antitabaquismo, de la Universidad Nacional Autónoma de México, detectó que la persona fumadora produce alteraciones al incrementarse el número de despertares nocturnos.
Ulises Jiménez, médico especialista en trastornos del sueño, explicó en qué consistió su estudio: "La inquietud era saber qué le sucede al sueño de los fumadores crónicos, o sea aquellas personas que tienen más de diez años de consumir cigarrillos y que éste sea superior a una cajetilla".
Para ello y en colaboración con la clínica Antitabaquismo, también de la UNAM, se seleccionó a 24 fumadores y 24 personas sanas, con el fin de hacer el estudio comparativo, precimé . Después de analizar el sueño de ambos grupos se obtuvo que aquellos que fuman, duermen mal durante la noche y tienen momentos de vigilia nocturna o sea, lo que se le denomina despertares más frecuentes que las personas sanas.
El especialista explicó que los despertares para el ser humano son imperceptibles, ya que éstos tienen una duración no mayor a los 30 segundos y que en personas sin adicciones y sin enfermedades, poseen alrededor de 10 ó 15 eventos de este tipo, durante la noche.
En cambio, una persona fumadora llega a tener más de 30 despertares en una noche, explicó Ulises Jiménez, durante una entrevista realizada en las instalaciones de la clínica ubicada en el interior del Hospital General de México.
Estos despertares frecuentes, continuó el especialista, inciden de manera muy importante en el sueño de los fumadores, debido a las altas dosis de nicotina que consumen en cada cigarro, especificó el galeno.
Como una segunda fase de la investigación, explicó que también se analizó el sueño de los fumadores durante la etapa de abstinencia que se realizó durante un mes.
Los resultados, dijo, medidos a la segunda y tercera semanas fueron más o menos los mismos que en la primera etapa, es decir las personas adictas presentaron apróximadamente el mismo número de despertares.
Este trastorno, agregó el investigador, ocasiona a los fumadores irritabilidad, agresividad, cansancio y somnolencia durante el día, por lo que sus necesidades de consumo de tabaco se ven agudizadas, lo cual contribuye al detrimento de su estado de salud.
El llevar a cabo este estudio, expresó, permite a los tabacólogos tomar estos resultados como referencia en el tratamiento de pacientes que necesitan o desean abandonar esta adicción.
