SUN-AEE
MÉXICO, DF.- Por lo regular, es el admirador el que ansía conservar algún recuerdo de un buen concierto, y guarda como un tesoro la fotografía obtenida en esa noche especial. Pero ayer, Butch Vig, baterista de Garbage, invirtió los papeles.
El músico aprovechó cuatro momentos del show para tomarle fotos a la audiencia que los recibió en su regreso al Distrito Federal.
Esa fue una muestra de que, tras una etapa de hartazgo, enfermedades y hasta cirugías, que por poco deriva en la ruptura de la agrupación, el cuarteto de Wisconsin está disfrutando su actual gira como si fuera la primera... o la última.
Sólo convocaron a cinco mil personas al Palacio de los Deportes en su cuarta visita a México, pero el concierto fue, efectivamente, para recordar.
Luego de un tibio recibimiento a Los Abandoned como banda abridora, Garbage tomó el escenario y lo dejó tras 90 minutos. La pelirroja Shirley Manson se aparece con su vestido corto y desde entonces decenas de teléfonos celulares salen a relucir. La tecnología permite hoy que la imagen de las largas piernas de la vocalista no se quede sólo en la mente del espectador (y eso, aunque en baja resolución, es un tesoro).
Primero sonó el clásico Queer y después Bad Boyfriend, uno de los temas del disco Bleed Like Me que motiva el tour. La banda revive Supervixen y en cuanto la concluyen, Shirley lee la primera de varias frases en español que preparó en un papel. "Estamos muy contentos por estar aquí otra vez", dijo la escocesa, y parecía que acababa de dar la noticia del siglo. Sin embargo, otras de sus intervenciones en inglés serían más aplaudidas.
Por ejemplo, cuando terminaron I Think I?m Paranoid, la cantante comentó que le conmovió una carta que una chica le dio en una firma de autógrafos previa al show.
En la misiva le decía que "no se había sentido bonita ni un sólo día de su vida", y Manson, quien en su juventud pasó por una crisis similar, afirmó que la belleza no importa sino "seguir tus sueños."
"Gracias por su apoyo en estos diez años", expresó después y a las 22:36 regaló otro momento para atesorar: en Why do You Love Me se tira en el suelo y jadea, sin huella de cuando perdió la voz por unos quistes en las cuerdas vocales.
Sex is not the Enemy, Paranoid, Hommering, Push it, Happu home, Shut your Mount, Run baby Run, Why do you Love Me, Vow, Only Happy y Grouw Up, fueron algunos de los temas que hicieron retumbar el recinto capitalino.
Garbage recordó Vow, Stupid Girl y también When I Grow Up. El fin llegó, pero no sin que Shirley declarara: "Los fans de México son los más cabr...".
ADMIRA CELIA A SU AMIGA
Celia Lora fue una de las miles de fanáticas que la noche del viernes bailaron y cantaron al ritmo de la música de Garbage, pero, a diferencia de todos ellos, la joven sí ha tenido la oportunidad de tener muy de cerca a Shirley Manson, vocalista del cuarteto.
"Me encanta el grupo desde hace mucho tiempo. A Shirley la conocí cuando tenía 14 años, en una entrega de premios Grammy, y se portó buenísima gente, le dije que era de México y me dijo que le encanta este País, por eso digo que no es jalada cuando ellos se refieren tan bien a México.
"Lo que no entiendo es por qué siempre se la pasa diciendo que es fea... Creo que tiene la autoestima baja, ¿qué quiere? ¡que no moleste!", exclamó Celia al término del concierto que los intérpretes de Stupid Girl ofrecieron en el Palacio de los Deportes.
Además, la también admiradora de Ricky Martin reconoció que el nuevo álbum de la banda, Bleed Like Me, no le gustó mucho, pues prefiere el Version 2.0 (1998).
"Como que suenan medio igual. Aparte, se tardan mucho en sacar disco, y eso sí desespera mucho, pero bueno, el concierto me gustó", señaló.
HACEN SU AGOSTO
Previo al concierto de Garbage en el Palacio de los Deportes, los vendedores ambulantes que suelen colocarse en los alrededores de ese inmueble hicieron su agosto al comercializar playeras, sudaderas, gorras, ceniceros, tazas, llaveros, posters y chamarras con el logotipo del grupo.
-Al igual que en otros conciertos de figuras internacionales, como The Cure, uno de los productos más solicitados por los seguidores que poco a poco ocuparon el Domo de Cobre fueron las playeras, cuyos costos oscilaban entre 80 y 160 pesos.
FUENTE: Agencia Reforma
