Remedios Guadalupe Guzmán Elizalde arremetió en contra de su propia hija de seis años, golpeándola con las manos y con una manguera, y ahora está en la cárcel gracias a la denuncia de los vecinos que escucharon a varios metros de distancias los gritos de la menor, según los datos proporcionados por la Procuraduría General de Justicia.
En la calle San Martín Caballero de la colonia 12 de Diciembre, se registró un caso más de violencia intrafamiliar, en donde una mujer, de 28 años, reprimió a su menor hija a golpes, dejándole visibles marcas en el rostro, piernas, espalda y antebrazos, al intentar cubrirse de los impactos que le propinaba su propia progenitora.
La tarde del martes, Remedios, madre de la víctima, inició una ?tunda? en contra de la menor, porque ésta no dejaba de llorar a raíz de que la había regañado, optando por golpearla para que se callara.
Varios vecinos se dieron cita en el exterior de la casa marcada con el número 133 de la calle citada, para intentar hacer algo en contra de la madre golpeadora, decidiendo hablar a la Policía Ministerial para que acudiera a dar auxilio a la pequeña.
Los agentes de la Ministerial llegaron en compañía del Ministerio Público y personal de Trabajo Social, de la Procuraduría General de Justicia, para que se hicieran cargo del caso.
Al percatarse la menor de la presencia de las autoridades, salió y corrió hacia ellos, para escudarse de la golpiza de su madre, apreciándosele diversos golpes en varias partes del cuerpo.
Los vecinos del lugar aseguraron que este tipo de casos ya se habían presentado varias veces en esa casa, pues Remedios, de manera constante, reprendía a golpes a la niña.
Los elementos de la Policía Ministerial procedieron a detener a la agresora y ponerla a disposición correspondiente, donde argumentó que lo hacía porque la menor se portaba mal.
La niña fue llevada al DIF para que recibiera atención médica y dejarla en resguardo de esa instancia mientras se resuelve la situación legal de la madre.
Violencia intrafamiliar
Continúan los casos de violencia intrafamiliar en la capital duranguense, pues en las últimas 48 horas se registraron ocho casos en la Dirección Municipal de Seguridad Pública, en los que, en su mayoría, los padres agreden a sus esposas y a sus hijos, aunque también se ha dado el caso de que la madre es la que se aprovecha físicamente de su cónyuge y demás miembros de su familia.
En el fraccionamiento Villas del Guadiana, se registró un caso de violencia intrafamiliar, donde la señora Érika Liliana Salazar Martínez, de 31 años, fue remitida a los separos de la cárcel municipal, a petición de su esposo Aarón Salazar Martínez, por agredirlo física y verbalmente a él y a sus hijos, llegando al grado de amenazarlos con un cuchillo.
En la colonia Valle del Guadiana, también fue denunciado Enrique Cruz Hernández, quien golpeó a su esposa María Cristina, al mismo tiempo que la insultaba y la amenazaba en el interior de su domicilio ubicado en la privada Teresa de Calcuta.
Bajo los influjos de la droga, Guadalupe Quintero Herrera, de 23 años, fue denunciado por agredir física y verbalmente a los miembros de su familia en la colonia Morelos Norte.
Todas las personas que han sido remitidas por estos motivos son puestas a disposición del Juzgado Administrativo, donde se canalizan más de 30 casos al mes a instancias de apoyo a las víctimas de violencia intrafamiliar.
