Se interrumpe el tráfico ferroviario por primera vez en más de 100 años, la mayoría de los aeropuertos fueron cerrados.
SUN-AEE
TAIPEI, TAIWÁN.- Al menos dos personas murieron, 58 resultaron heridas y otras nueve fueron dadas por desaparecidas ayer como consecuencia del paso del tifón Hai-tang por Taiwán, con vientos huracanados e intensas lluvias.
Los meteorólogos dicen que Hai-tang es el tifón más fuerte que azota la isla en los últimos cinco años, pero la labor del Centro de Prevención de Desastres, con sus operativos de evacuación anticipada de unas 800 personas, parece que está dando frutos y hasta el momento sólo se ha confirmado el fallecimiento de dos mujeres ahogadas en un río de Taoyuan y en el pantano de Yucheng, ambos en el norte de la isla.
El Centro de Prevención de Desastres indicó que la mayor parte de las 58 personas heridas lo fueron por caídas de árboles, anuncios publicitarios y cristales rotos. Las entradas de muchos edificios de Taiwán están protegidas por sacos de arena, el mismo método que emplearon las autoridades para proteger de inundaciones al Metro de la capital.
El tráfico ferroviario se interrumpió en toda la isla por primera vez en más de 100 años, mientras que la mayoría de los aeropuertos fueron cerrados.
Las tres centrales nucleares de la isla bajaron su funcionamiento a entre 25 y 30 por ciento de su capacidad como medida de precaución. El Parque Industrial y Científico de Hsinchu, corazón de la manufactura informática de la isla, tampoco registró daños apreciables, aunque sí ha visto interrumpida la producción en algunas de sus fábricas.
El emblemático edificio 101 de Taipei, considerado el más alto del mundo con sus 508 metros de altura, no sufrió daños y se yergue en medio de vendavales y aguas torrenciales que ponen a prueba su firmeza.
Unos cuatro mil 800 pescadores chinos que trabajan para barcos taiwaneses recibieron permiso para refugiarse en Taiwán durante el tifón, como medida humanitaria que se salta las prohibiciones derivadas de la situación de tensión política entre China y la isla.
China considera a Taiwán una provincia “rebelde”, mientras que la isla se define como un estado soberano.
El temporal no ha impedido que los ladrones salieran a trabajar y, que se sepa, visitaron una tienda de Gucci en la avenida Chung Shan de Taipei, de la que se llevaron millones en efectivo y ropa.
El presidente taiwanés, Chen Shui-bian, y el primer ministro, Frank Hsieh, siguen de cerca las operaciones de rescate, coordinadas por el Centro de Prevención de Desastres de la isla, dependiente del Ministerio del Interior.
Los últimos datos del Servicio de Meteorología Central sobre Hai-tang es que se encamina sobre el Estrecho de Taiwán a una velocidad de 14 kilómetros por hora. Los tifones y tormentas tropicales son muy frecuentes en Taiwán de julio a septiembre y Hai-tang, el nombre de una flor china, es el primer tifón que afecta a la isla en esta estación.
Muestra de furia
La región montañosa del centro de Taiwán suele ser la zona que más sufre por los azotes de la naturaleza.
*Los tifones y tormentas tropicales son muy frecuentes en Taiwán de julio a septiembre y Hai-tang, que toma el nombre de una flor china, es el primero de esta temporada en visitar la isla.
*Hace cuatro años, Taiwán afrontó uno de los tifones más devastadores de su historia, Toraji se llamó y mató unas 200 personas.
*Unos pocos meses más tarde le sucedió el tifón Nari, que provocó la mayor inundación de la historia en Taipei y se cobró un centenar de vidas humanas.
FUENTE: EFE
INUNDACIONES EN RUMANIA
El último balance de las inundaciones que sufrió Rumania la semana pasada eleva a 21 las víctimas mortales, mientras que los daños materiales podrían superar los mil millones de euros, según distintas estimaciones recogidas por los medios de comunicación del país balcánico.
El cuerpo sin vida de la última víctima fue encontrado en el departamento de Vrancea, en la provincia Moldavia, donde se han registrado 17 muertes, informó ayer el jefe del Gobierno, Calin Popescu Tariceanu, tras presidir el Comité para Situaciones de Emergencia.
Unas 11 mil casas fueron inundadas y de ellas 600 quedaron totalmente destruidas, lo que ha dejado sin hogar a unas 14 mil personas. Además, unas 300 localidades quedaron aisladas por los cortes de carreteras y de otras infraestructuras; 106 siguen sin luz y 34 sin teléfono.
En una primera estimación, la Compañía Nacional de Autopistas y Carreteras indicó que los daños sufridos en vías y puentes se elevan a 130 millones de euros.
No obstante, ayer se reanudó el tráfico entre Bucarest y Focsani (Vrancea) y por otras vías regionales de Moldavia, aunque más de 20 tramos de vías férreas permanecen cortadas.
