HUIXQUILUCAN, EDO. DE MÉXICO.- Después de concluir su participación con una ronda de 68 golpes en el Abierto Mexicano Femenil de Golf, la mexicana Lorena Ochoa salió contenta del campo, así como todo el público que la ovacionó al ver el tiro que le redituó su último birdie de ayer.
Sin aún conocer la posición general en que se colocará la tapatía, ya que todavía las líderes están en el campo del Club BosqueReal, todo indica que su meta de meterse al top ten se cumplirá, ya que está momentáneamente colocada en el cuarto sitio.
Debido a que su caddie Tom Torphe se enfermó del estómago, Rafael Alarcón salió al campo como asistente de Lorena, lo cual fue "maravilloso para los dos, además de ser mi entrenador es un gran amigo que me ayuda mucho en el factor mental", dijo la golfista.
Agradeció a los aficionados que se presentaron ayer, cerca de cinco mil personas, por el apoyo que le brindó durante los tres días de competencia, "a pesar de que ayer tuve un mal día la gente me siguió motivando y hoy ni se diga, en el último hoyo pedí a Dios que me ayudara".
La máxima exponente del golf en México señaló que seguirá apoyando a la niñez que le interese practicar este deporte y que seguirá trabajando en conjunto con la Federación, ya que sus inconformidades ya quedaron atrás y ahora lo importante es trabajar para bien del golf.
Aseguró su presencia en el torneo que se disputará en Morelia, Michoacán, en abril próximo, aunque dijo que no tomará esa competencia como una revancha por el trofeo que se le negó en este Abierto Mexicano Femenil.
De las jugadoras amateurs que quedaron en los últimos lugares, comentó que el resultado no es importante, sino el aprendizaje de haber estado con las mejores del mundo "espero que este torneo las haya motivado para seguir preparándose".
