Lima, (EFE).- El misterio que rodea el caso de una joven peruana embarazada que fue hallada muerta y con señales de una cesárea en una carretera puede quedar resuelto si se confirma que un bebé internado en una maternidad limeña es el suyo.
El director de la maternidad, Víctor Bazul, confirmó que una mujer que luego fue detenida como sospechosa de estar implicada en la muerte de Claudina Herrera, de 18 años, había llevado a un bebé recién nacido a ese centro médico el pasado 19 de octubre.
La mujer, identificada como Isabel Palacios Gávez, dijo que había dado a luz en un taxi y como el bebé presentaba un cuadro de disentería y presión arterial baja quedó hospitalizado.
Bazul dijo que no hay confirmación de que Palacios sea la madre biológica del bebé porque no la sometieron a ningún tratamiento.
Aunque el bebé ya está en condición de ser dado de alta, no saldrá "hasta que se aclare" este caso, indicó el director médico.
El mismo día que el bebé ingresó en la maternidad, Claudina Herrera, que estaba embarazada de ocho meses, fue convencida por otra mujer de someterse a exámenes prenatales gratuitos en un centro de salud distinto al que solía acudir en el distrito de Villa El Salvador.
Palacios Gálvez, de 37 años, fue detenida por la Policía gracias a la información suministrada por otras gestantes amigas de Claudina, que también fueron contactadas por la mujer para hacerse exámenes en un lugar recomendado por ella.
La Policía sospecha que Palacios Gálvez pertenece a una banda que se apodera de bebés para venderlos por diez mil dólares en el extranjero.
