Pekín, (EFE).- Unos arqueólogos chinos descubrieron un conjunto de fósiles pertenecientes a un dinosaurio herbívoro de hace 180 millones de años en la provincia de Yunnan (sur), rica en restos de animales prehistóricos, informó la agencia Xinhua.
Los restos analizados hasta ahora desvelan que el animal medía 10 metros de largo y pesaba entre 7 y 8 toneladas, manifestó Chen Ailin, del Museo de Fósiles Animales del condado de Chengjiang, donde se produjo el hallazgo.
La excavación comenzó el pasado día 2 después de que un lugareño hallara los fósiles en la ladera de una montaña de 1.840 metros de altitud, y los científicos se apresuran para completarla en los próximos diez días ya que la exposición al aire ha comenzado a dañar los valiosos restos.
Según explicó Chen, las características físicas del dinosaurio, patas delanteras más cortas que las traseras, cuello esbelto, cabeza muy pequeña y una cola de cinco metros, muestran que habitaba en una zona pantanosa con hierbas acuáticas.
China es una fuente inagotable de fósiles de dinosaurio y de otras especies prehistóricas y, al mismo tiempo, de contrabandistas que tratan de hacer negocio con ellos, como demuestran los incontables juicios que se celebran en el país contra traficantes nacionales y extranjeros.
En otro hallazgo anunciado, arqueólogos chinos y japoneses completaron cuatro años de excavación de un jardín real en el Palacio Daminggong de Xian, antigua capital de la Dinastía Tang (618-907 d.C.) y cuna de los famosos guerreros de terracota.
El jardín, conocido como Lago Taiyechi, era utilizado exclusivamente por la familia imperial y contaba con los típicos pabellones acuáticos, corredores y salones.
Localizado en el centro de la residencia del emperador, es uno de los ejemplos más exquisitos de este tipo de arquitectura natural y tuvo influencia en los jardines imperiales de Japón y la Península Coreana, aseguró He Suili, experto del Instituto de Arqueología de la Academia de Ciencias Sociales de China.