EFE
MÉXICO, DF.- La Oficina de la Presidencia mexicana, la Cancillería y la Procuraduría General de la República (PGR), son las tres dependencias públicas menos dispuestas a informar de sus actuaciones, afirmó ayer un experto en transparencia.
El comisionado del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), Juan Pablo Guerrero, dijo ayer “a título individual” en una reunión con la prensa extranjera “que se pueden ubicar con toda claridad tres dependencias que se han (...) tipificado por lo ‘mañosas’: la PGR, Relaciones Exteriores y Presidencia”.
El IFAI, un organismo independiente, vigila el cumplimiento de la Ley Federal de Acceso a la Información, aprobada en 2002, que permite a cualquier ciudadano solicitar información pública.
Hasta el 20 de enero de este año el organismo recibió más de 63 mil 800 solicitudes y trató de canalizar las respuestas de los organismos públicos federales a los ciudadanos.
Pese a que en muchos sentidos la Ley representa un avance, Guerrero lamentó que las tres oficinas de Gobierno mencionadas se hayan convertido en las que más trabas ponen.
Guerrero explicó que en el caso de la oficina del presidente Vicente Fox, “cada vez que se piden los documentos relativos a esas decisiones, la Presidencia dice, ‘no los tengo’”.
El experto lamentó que de forma recurrente se den respuestas como “aquí no guardamos nada”: “desde el punto de vista histórico es fundamental (tener los documentos) porque si algo se constituye como memoria de un Gobierno son los archivos presidenciales”, indicó.
Como ejemplo de las decisiones de Gobierno que fueron tomadas y sobre las cuales las peticiones de información fueron rechazadas, citó la de no suscribir Tratados de Libre Comercio (TLC), anunciada por Fox en noviembre de 2003.
Otra decisión contestada con hermetismo fue la de la fusión los bancos estatales Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Mexicano de Comercio Exterior (Bancomext), anunciada en agosto del pasado año y criticada desde el Congreso.
Tampoco se han ofrecido documentos de cómo funcionan los sistemas de evaluación de los secretarios del Gabinete.
Para Guerrero, con año y medio de funcionamiento de la Ley en la oficina de Fox “sí hay una tendencia sistemática a decir, ‘no tengo’ documentos”.
El caso de la PGR “es el problema más serio para el Instituto”, señaló el comisionado, porque “primero dicen que todo es reservado” y cuando el IFAI les ordena entregar la información, se niegan a hacerlo.
La tercera dependencia que contesta que carece de documentos públicos consultables es la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) que encabeza Luis Ernesto Derbez, que contesta a las peticiones con un “no hay documentos”.
“Al principio el IFAI decía ‘ese documento es público’. Ahora SRE sistemáticamente dice ‘no existe’”, dijo Guerrero, quien lamentó que el continuo recurso a la Ley conlleve un “efecto perverso” con las negativas continuas a dar publicidad los documentos públicos.
La Ley de transparencia mexicana clasifica la información en tres categorías: pública, al alcance de quien la solicite, reservada, con plazos que limitan el acceso a ella y confidencial, sólo a disposición de las personas a quienes atañe.