Madrid, (EFE).- Cenar en la misma mesa con familiares que se encuentran al otro lado del mundo, asistir virtualmente desde casa a la boda de un amigo o cerrar un negocio por videoconferencia desde la cama y que el cliente vea una oficina, será posible con la llegada del "hogar digital".
El director de "casadomo.com", Stefan Junestrand, que participó en Madrid en una ponencia sobre "hogar digital" durante el congreso Mundo Internet 2005, presentó el proyecto de la vivienda "com.Home".
En el nuevo proyecto "com.Home" se integran tecnologías y sistemas de automatización y control que mejoran las telecomunicaciones, aumentan la seguridad, facilitan la gestión y el mantenimiento de la casa e incrementa el confort.
El diseño arquitectónico del hogar, según Junestrand, tiene que facilitar las actividades relacionadas con la vídeo comunicación.
De esta manera, se conciben salones con pantallas gigantes que transmiten imágenes de tamaño real para que se pueda interactuar de la forma más verídica en eventos sociales, o se incluye una pantalla en la mesa del comedor para un invitado virtual.
Proyectos más alejados de la realidad, como una pantalla en el dormitorio que pueda reproducir los sueños al despertar, demuestran que la realidad y la ficción se mezclan en el diseño de la "casa del futuro" en el que trabajan arquitectos de todo el mundo desde hace más de una década.
Para el arquitecto Paolo Sustersic, que también participó en las jornadas, la vivienda del futuro no debería ser pensada sólo en términos digitales, sino que se debería concebir como una entidad capaz de aprovechar los recursos tecnológicos para adaptarse a las exigencias del habitante y no al contrario.
A su juicio, esta es la razón por la que la mayoría de las propuestas han salido de presentaciones multimedia de arquitectos "de moda" y de revistas especializadas.
Según Junestrand, el problema se encuentra en la falta de "cultura tecnológica" o ignorancia de la sociedad en general sobre la tecnología del hogar.
Sin embargo, para el sociólogo y escritor de libros sobre domótica Santiago Lorente el factor "inhibidor" de la construcción de hogares digitales se encuentra en las promotoras, cuyo objetivo es la máxima rentabilidad que les lleva a construir sin innovación y con una mano de obra poco cualificada.
Otro factor a tener en cuenta, añadió, es que en las universidades no se forma a los arquitectos en este tipo de construcciones y estos seguirán sin conocimientos hasta que el Ministerio de Vivienda dicte una ley que obligue a incluir elementos de domótica en la construcción de edificios.
