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Nueva York, Estados Unidos.- Hollywood está de capa caída. A la crisis de creatividad de los estudios, que últimamente saturan las pantallas de remakes y superhéroes, se une ahora la peor crisis de taquilla en los últimos 30 años, que ya registra el más largo desplome desde que en 1974 se implantó el sistema que permite conocer la recaudación de forma precisa, y que se traduce en 18 semanas seguidas de descensos. ¿La razón? Los citados remakes y el imparable auge del DVD.
Ni la nueva película de Steven Spielberg, Guerra de los mundos , logró este fin de semana festivo detener la tendencia negativa de la taquilla estadounidense, informaron estudios en Hollywood.
De acuerdo con la fuente, las 12 películas más taquilleras registraron 25 por ciento menos de recaudación que el año pasado. Y eso a pesar de que el fin de semana del 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos, suele significar altos ingresos para la industria del cine. Hace una semana, sólo llegó a 116.5 millones de dólares, 16 por ciento menos que el mismo periodo de 2004, cuando Fahrenheit 9/11 recaudó 24 millones de dólares en su debut.
Son ya 19 semanas de declive, una situación que supera el peor momento hasta ahora, cuando en 1985 saltaron las alarmas con 17 semanas de descensos.
Ni la nariz de Nicole Kidman en Embrujada ni el éxito de la cinta más esperada del año, Star Wars. La venganza de los Sith , han podido paliar la situación.
En su estreno, el 19 de mayo, el Episodio III recaudó 50 millones de dólares en un solo día, y desde entonces llega casi a los 350. Pero a pesar del taquillazo, Lucas o de Batman Begins (121.7), otros títulos como Cinderella Man sufren de indiferencia, quedando tan lejos de las expectativas que la cadena AMC ha puesto en marcha una táctica muy popular en el mundo de la publicidad, pero inusual en el cine: devolver el dinero a los espectadores si no les gusta esta cinta protagonizada por Russell Crowe y Renée Zellwegger, algo que ya hicieron en 1988 con Mystic Pizza .
La prueba de fuego fue este fin de semana, uno de los más esperados del año por la fiesta del 4 de julio.
Pero Tom Cruise-Steven Spielberg con Guerra de los mundos , no pudieron contener la caída en picada. La versión contemporánea del clásico de H.G. Wells debutó el miércoles, recaudando 21.3 millones en Estados Unidos, lo que indica que tendrá muy difícil superar las cifras del año pasado, cuando Spiderman 2 batió el récord de taquilla en la fiesta nacional, con 40.4 millones el día del estreno y 180.1 millones en sus primeros seis días en pantalla.
?Estamos trabajando con un gran déficit que podría tumbar muchos negocios. Romper el desplome no es todo, debemos conseguir que el público acuda de nuevo al cine?, dice Paul Dergarabedian, presidente de Exhibitor Relations. Y mientras empresas como la suya, que registran los números de taquilla, se lamentan de la crisis, la industria estudia todas las situaciones, con especial atención al auge del DVD.
Los datos no dejan de sorprender: según una reciente encuesta, 73 por ciento de los estadounidenses prefiere quedarse en casa para ver las películas, frente a 22 por ciento que acude al cine. La competencia del DVD es tan feroz que los estudios comienzan a elegir a los actores pensando en los que mejor funcionan en el salón familiar.
Además, empiezan a preguntarse si los cotilleos no estarán perjudicando la taquilla. Y lo que antes era positivo para vender entradas, ahora pesa en la recaudación. Demasiada información sobre la vida privada de los actores, piensan muchos. Como en el caso de Lindsay Lohan, protagonista de Herbie: Fully Loaded , y su gusto por las fiestas nocturnas. O el romance entre Cruise y Holmes, que para algunos, ha desviado la atención durante la promoción. ?Siempre es problemático que se hable más de la estrella que de la película, pero este impacto es difícil de cuantificar?, comenta Dergarabedian. Lo que sí se puede contar, para desesperación de la industria, son las butacas vacías en las salas de cine.