Tegucigalpa, (Notimex).- La hondureña Ana Luisa Otero, de 24 años de edad, protestó ante la Corte Suprema de Justicia, cubierta sólo por una diminuta tanga hilo dental porque la retuvieron presa pese a ser inocente y por un fallo comprado por un juez.
La presencia de Otero motivó a funcionarios del Poder Judicial a salir a la calle para admirarla y a otros a correr en forma discreta las cortinas de los ventanales de sus oficinas para observarla.
La joven a viva voz criticó al Poder Judicial, al que tildó de ser "el más corrupto del mundo, donde sus magistrados y jueces se venden al mejor postor".
Miembros de Seguridad de la Corte de Justicia arrancaron algunas cortinas y procedieron a cubrirle el cuerpo a Otero y a llevársela en un vehículo oficial con rumbo desconocido.
La joven, en breves declaraciones a periodistas antes de que se la llevaran los miembros de Seguridad, aseguró que estuvo presa en una cárcel de este país, aunque se sabía que era inocente y por un fallo comprado por un juez, al que no identificó.