Son las 17: 00 horas del viernes 13 (hago aquí unos cuernos con los dedos para exorcizar la fecha) y la pantalla en blanco del procesador de palabras refleja mi impotencia mental ante la inútil búsqueda de temas de interés público para esta columna bisemanal. Y claro que hay noticias, pero ¿cuántas veces y por cuánto tiempo no se ha dicho lo mismo en la mayor parte de las columnas editoriales de los periódicos? Incontables...
Leo hoy, por ejemplo, que han renunciado a sus cargos el secretario de Gobierno de Coahuila, Raúl Sifuentes, y el responsable de la marcha financiera de la administración estatal, Javier Guerrero González, aspirantes ambos a la candidatura del PRI para el relevo en la gubernatura de nuestra entidad. Las dos noticias fueron participadas a los reporteros por el gobernador de Coahuila, Enrique Martínez y Martínez, quien apenas unas horas antes, el día anterior, había expresado no tener una fecha precisa para las renuncias, ni los nombres de quienes podrían sustituir a los renunciantes¸ pero el teléfono y la casualidad me pusieron en comunicación con Guerrero y con Sifuentes quienes, cada cual por su lado, dieron sus propias versiones. Nótese el uso del orden alfabético en los apellidos ya que las jerarquías burocráticas son parejas:
Por la vía telefónica Javier Guerrero confirmó a este columnista que se iría de la nómina estatal en unos días más. “Y no por licencia, sino por renuncia” aclaró en una especie declarativa de quema de naves al estilo Hernán Cortés. Raúl Sifuentes, por su parte, sonrió por nuestra pregunta, face to face, sobre su fecha para la renuncia: “voy a cobrar esta quincena y no sé, quizá el lunes o una semana después”. Un indiscreto lo cuestionó al bote-pronto: ¿cobrará la tercera parte de la próxima quincena? Él encogió los hombros y aclaró con una sonrisa a flor de labio: “no sé, voy a preguntar”.
Lo cierto es que después de que transcurran cinco días tendremos dos precandidatos en abierta exposición de campaña electoral en los dentros del Partido Revolucionario Institucional. Y no tardarán en saltar a la palestra política, delo usted por seguro, los cuatro restantes pre candidatos: Arizpe, Gutiérrez, Moreira y Ramón. Cuestión de días y de “asinceramientos” ¿Qué irá a hacer el PRI con esta media docena de ases?
No es diferente la situación en el ámbito partidista nacional: la andanada de Roberto Madrazo contra el presidente Fox tiene todas las características de una proclama política anticipada; los movimientos al interior del Partido de la Revolución Democrática muestran, a todas luces, que a los aspirantes verdiamarillos se les queman las habas por definir posiciones y en cuanto al Partido Acción Nacional (que está en el querer, no en el poder) resulta claro que el secretario de Gobernación se ha decidido a agandallar la candidatura de su partido en perjuicio de sus competidores. Sería bueno que el delegado del PRI en Coahuila, Manuel Cavazos Lerma, les impartiera la conferencia magistral “candidato de unidad” que tan ampliamente domina y repite ante los pre candidatos a cada momento.
En otro campo del interés público durante esta semana se manifiestó con transparencia modelo ICAI el odio personal del presidente Vicente Fox contra el doctor Rogelio Montemayor Seguy, que lo condujo a ordenar a su secretario de la Función Pública la imposición al ex director de Pemex de una multa -administrativa, supongo- por un poco más de mil 421 millones de pesos. Lo excesivo de la cantidad de dinero expresa, por sí misma, que la intención de la autoridad administrativa para discernirla era más “fregativa” que justiciera: una suma así resulta inaccesible a un ex servidor público, por más que su último empleo haya sido el de director de la poderosa paraestatal Petróleos Mexicanos. Pero además estamos seguros de que si el sancionado fuera uno de los cinco o seis ricos mexicanos que aparecen en Fortune, junto a la multa le habrían dado el remedio y el trapito. Además, según propone un apotegma jurídico, nadie está obligado a lo imposible.
Es tan absurda la cantidad que dicen que debe pagar el doctor Montemayor que nos hizo recordar a aquel generalote revolucionario a cuyas manos cayó un viejo enemigo y para dárselas de justo hizo que lo procesara el juez de paz del pequeño municipio en que estaba comisionado por la Secretaría de la Defensa Nacional, a quien ordenó: “mire señor juez, el Gobierno que yo represento es democrático y moderno, así que me juzga a este pernicioso individuo con todas las de la Ley. Y cuando digo la Ley, es que es la Ley, porque estamos en un Estado de Derecho. Así que después de procesarlo me lo sentencia a cadena perpetua; que la cumpla enterita y luego me lo fusila y le pega el tiro de gracia, con buena puntería para que no sufra. Acuérdese que somos muy respetuosos de los derechos humanos”.
Visto así el panorama político, en cinemascope y a todo color, habremos de concluir que eso del ordenador con la página en blanco viene a ser solamente una mala excusa de los columnistas editoriales para el surmenage y las ganas de no trabajar. Por mi parte, creo que haré ahora mismo esto último...
ALBERTO ALlEGRE FAMILIAR
Anteayer falleció el empresario Alberto Allegre Familiar, distinguido y esforzado luchador lagunero. Alberto era un hombre de excelente trato, tenía un amplio conocimiento de su país, era líder y factor de equilibrio en muchos problemas y proyectos de la comunidad. Siempre joven, a pesar de sus años; siempre alegre y dispuesto al buen humor: lo extrañaremos en todo Coahuila. Envío mi pésame respetuoso a su familia y a todos los laguneros de corazón.
