MÉXICO, DF.- Sólo el defensa paraguayo Dario Verón coincidió con Hugo Sánchez Márquez, en que Pumas fue víctima de la persecución y represalias por parte de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) para evitar que el equipo ganara el tricampeonato.
El portero Sergio Bernal y los mediocampistas Jaime Lozano, Gerardo Galindo y el brasileño Leandro Augusto coincidieron en que los árbitros son seres humanos y como tales se equivocan, y en esas fallas no ven intención.
También dijeron que no hay excusas por haber quedado eliminados de la liguilla del Campeonato Clausura 2005 del futbol mexicano de la Primera División Profesional, pues simplemente jugaron mal la temporada.
El central Dario Verón dijo que observó durante lo que va de la campaña regular la persecución para Pumas, porque los árbitros sancionaron con tarjetas en forma exagerada y sin aplicar el mismo criterio para los equipos contrarios en cada partido.
Con la eliminación a la liguilla también quedó de manifiesto que varios jugadores quieren salir del conjunto auriazul, siendo uno de ellos el brasileño Ailton da Silva.
¿Qué dijo Hugo Sánchez?
Al finalizar el encuentro ante Monterrey, el cual ganó Rayados en la noche del miércoles por 2-1, Sánchez Márquez aseguró que esa persecución y represalias, como resultado de sus acres críticas al organismo, se reflejaron en las acciones de los árbitros y en las de la Comisión Disciplinaria para perjudicar al equipo.
De este acoso arbitral culpó a la comisión que preside Arturo Yamazaki y a la Disciplinaria, que dirige Alfonso Sabater.
Abiertamente no mencionó como cabeza de estos actos al presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Alberto de la Torre, pero en el aire dejó la idea de que dirigió estas acciones.
Recordó que en el Apertura 2004 se sacó provecho de la buena relación que tenía el presidente del club auriazul, Aarón Padilla, por lo cual la Comisión de Árbitros designó silbantes que él mismo calificó como "galácticos".
Pero también vio que todo esto cambió a partir de sus declaraciones de que tanto Alberto de la Torre como el argentino Ricardo La Volpe debían renunciar a sus puestos después de que el segundo no cumplió con lo dicho de ganar una medalla en los Juegos Olímpicos Atenas 2004.
Indicó que su denuncia la hace porque busca se limpie el futbol mexicano y como siente que no insulta a nadie, no tiene temor a ser citado por la FMF.
También dijo que hace esto porque el equipo ya no corre ningún riesgo de más represalias en lo que le queda de la actual campaña, pues ya está prácticamente eliminado.
Ante esta situación, la concentración de él y sus jugadores está en la final ante el Saprissa de Costa Rica por el título del torneo Copa de Campeones, clasificatorio para el Mundial de Clubes, a disputarse en diciembre próximo en Japón.
"Ahí no creo que me vayan a quitar la ilusión de ir al Mundial, pues estarán árbitros de otro país", declaró.
Reiteró que estos factores extracancha le hacen mucho daño a Pumas, al futbol mexicano y al país y que en lo personal piensa irse a dirigir en el extranjero, pero antes "tengo una misión con Pumas, ir al Mundial de Clubes, y que me aprovechen para dirigir a la Selección en la Copa del Mundo Alemania 2006".
