El presidente de Irak, Jalal Talabani, dijo haber obtenido confesiones importantes del ex líder y que éste las firmó.
BAGDAD, (Reuters) .- Saddam Hussein confesó haber dado órdenes para realizar ejecuciones y para llevar a cabo una campaña contra los kurdos en la que se cree que murieron unas 100 mil personas, dijo el presidente iraquí, Jalal Talabani.
Pero Talabani no explicó si Saddam admitió haber cometido algún crimen, o si simplemente reconoció que era la cabeza del Estado y el comandante en jefe del ejército en el momento en que se llevaron a cabo varios operativos militares.
"Me reuní con el investigador que interrogó a Saddam", dijo Talabani en una entrevista con la cadena de televisión estatal Iraqiya a última hora del martes. "Dijo que había extraído confesiones importantes de Saddam Hussein y que éste las firmó".
Las revelaciones llegan en medio de un clima de violencia en Irak. El miércoles, fuerzas estadounidenses e iraquíes se enfrentaron a insurgentes en el norte del país, mientras que una bomba colocada al lado de un camino dañó un vehículo en el sur.
Consultado acerca de las confesiones, Talabani dijo que "sobre los crímenes que cometió confesó al-Anfal y las ejecuciones", agregando que Saddam aseguró que: "Las órdenes fueron dadas por mí".
Al Anfal fue una campaña contra los kurdos que se desarrolló entre 1986 y 1989, en la que se dijo que unas 100 mil personas murieron y muchas aldeas quedaron destruidas. Talabani es kurdo.
"Saddam merece una sentencia de muerte 20 veces al día porque intentó asesinarme 20 veces", dijo Talabani, recordando sus días como rebelde kurdo que luchaba contra las autoridades de Bagdad.
Las declaraciones de Talabani, en la víspera de una visita a Estados Unidos, parecen ser parte de un movimiento pensado por el gobierno para preparar a los iraquíes para la ejecución de Saddam, que se cree sería colgado.
El portavoz oficial del gobierno dijo este fin de semana que el 19 de octubre comenzará el juicio del líder derrocado, acusado de un solo cargo por llevar adelante una matanza en represalia por un intento de asesinato en 1982.
Agregó que si Saddam es encontrado culpable en este caso, la corte podría prescindir de la necesidad de juzgarlo por otros crímenes, allanando el camino hacia una temprana ejecución.
Irak abandonó la pena de muerte inmediatamente después de la invasión estadounidense en marzo del 2003, pero luego la reintrodujo y la semana pasada ejecutó a los tres primeros criminales sentenciados a muerte desde el derrocamiento de Hussein.
