México, (EFE).- La primera cantina sin alcohol en México, con una oferta de sucedáneos de whisky, tequila, ron y champaña, jugos de fruta y 17 cockteles originales, abrió sus puertas en la capital del país con el nombre de "BarSin".
Othón Gomezcésar, dueño del "BarSin", dijo a EFE que espera que su local se convierta en nueva alternativa para quienes quieren dejar de beber o simplemente no les gusta, y que las personas que allí acudan "se emborrachen de alegría en un ambiente festivo y cantinero".
"Sólo el alcohólico en sus últimas busca el alcohol, el borracho consuetudinario en cambio lo que quiere es el ambiente, pasar el rato con los amigos, y si logras que se sienta bien, tal vez, no va a extrañar el licor", señaló Gomezcésar, quien ahorró más de un año para abrir su negocio.
"Mi objetivo es dar una alternativa a la gente que no bebe alcohol por decisión propia, por prescripción u obligación, porque aquí no tienen opciones y tienen que enfrentar la presión de los amigos y el ambiente de otros bares para beber", afirmó.
El bar, ubicado en las cercanías del barrio Condesa, una zona céntrica famosa por su vida nocturna, ofrece sucedáneos de ron (ronsin), whisky (whisin), tequila, champaña, sangría y de una serie de licores frutales como el kiwi, plátano, fresca, maracuya, limón y menta, entre otros, la mayoría traídos desde España.
A esto se suman 17 cocteles creados por el barman David Benneth y Juan Carlos Gallo, un sobrino de Gomezcésar y administrador de la cantina, y en el futuro las personas podrán pedir sus propias combinaciones.
Solamente el vino, que Gomezcésar importa desde Argentina, y tres tipos distintos de cerveza tienen una mínima cantidad de alcohol (0.5 por ciento) que no es suficiente para clasificarlas como bebidas alcohólicas (en México es a partir de 2 por ciento).
"Yo he hecho la prueba, me he tomado hasta quince de esas cervezas y me detengo porque me siento lleno, no por otra razón", asegura Gomezcésar, que se confiesa un ex alcohólico al que le han servido este tipo de bebidas para dejar de beber.
"La gente que salga de aquí nunca va a tener problemas, ni peleas de borracho ni temor al alcoholímetro (que en ciudad de México se aplica a conductores)", indicó.
Como en cualquier cantina los visitantes podrán degustar queso fundido con chorizo, con champiñones, una variedad de ensaladas, pastas y raviolis, consomés y cremas, platillos mexicanos como enchiladas suizas y rojas, y un surtido de platos con carne, pescado, pollo y cerdo.
Las especialidades de la casa son el bacalao a la vizcaína y el queso con chistorra.
Gomezcésar ha recibido numerosas expresiones de apoyo pero también ha enfrentado el rechazo de algunos grupos de Alcohólicos Anónimos en la ciudad que argumentan que "no van a sustituir su dependencia con otras sustancias".
"Se trata de sustituir una forma mala de divertirse por una buena", responde Gomezcésar a esas críticas.
En el "BarSin" "no se predica en contra del alcohol y no se curan enfermos, solamente pretendemos ofrecer una nueva alternativa, nada más", insiste.
El bar, "un proyecto con beneficio social" en palabras de su dueño, abre de 13:00 a 22:00 de la noche y las bebidas tienen todas el mismo precio, 35 pesos (3.2 dólares).
