Dicen los ?ilegales? que los federales les pidieron cinco mil pesos para permitirles continuar su camino
EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- Hacinados en dos cuartos permanecen 41 indocumentados que fueron asegurados por agentes de la Policía Federal Preventiva División Caminos el pasado viernes y por si fuera poco, los federales les quitaron cinco mil pesos con el argumento que les permitirían seguir su camino, denuncian los centroamericanos.
Entrevistados en las instalaciones de Bomberos de esta ciudad, ubicadas en el Periférico, los indocumentados, en su mayoría guatemaltecos, aunque también hay salvadoreños y hondureños, exponen la situación que viven.
Asegurados el viernes pasado por la noche cuando viajaban procedentes del sur del país hacia la frontera con Estados Unidos, los 23 hombres y 18 mujeres duermen en dos cuartos habililtados como habitaciones y ahí pasan los días sin poder hacer nada, vigilados por varios elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal para evitar que escapen.
Reconocen que por alimentación no han tenido problema, pues reciben almuerzo, comida y cena que les lleva personal del Instituto Nacional de Migración.
Tras varios días transcurridos desde que salieron de sus países de origen, tomaron un autobús de turismo hacia Ciudad Juárez, pero fueron descubiertos por agentes de la Policía Federal Preventiva y detenidos.
?Eran como las diez y media de la noche cuando nos detuvieron los de la Federal de Caminos que traían la patrulla 6160 y nos preguntó que si traíamos dinero para dejar continuar hacia la frontera. Le juntamos entre todos cinco mil pesos y se los dimos, pero de todos modos nos detuvieron? cuenta uno de los guatemaltecos.
El local donde se encuentran no tien regaderas, sólo hay un pequeño sanitario que utilizan todos y cuentan con una cubeta donde orinan los hombres.
Dicen que la mayoría tienen como 15 días sin bañarse y en el lugar donde son concentrados no lo pueden hacer porque no hay baño y lo que quieren ya es que los regresen a su país de origen.
Denuncias
En varias ocasiones los centroamericanos detenidos en la región, han denunciado en forma pública que sufren extorsiones por agentes federales durante su camino a la frontera con Estados Unidos.
El problema para los indocumentados es que no pueden presentar su queja o denuncia ante las autoridades, pues de lo contrario los repatriarían y es por ello que algunos agentes federales abusan de su condición ilegal.
El problema es permanente en virtud que las condiciones de vida en Centroamérica son críticas y muchos prefieren arriesgarse a cruzar el territorio nacional para ingresar a Estados Unidos.