Washington, (EFE).- El bebé de Sri Lanka que sobrevivió al "tsunami" y a ocho familias que lo reclamaron como suyo llegó con su padres a Estados Unidos para una gira de recolección de fondos para los damnificados en el sudeste de Asia.
Abilass Jeyarajah, de 4 meses, fue presentado en EU a través del programa "Good Morning America" de la cadena ABC de televisión que ha pagado por los pasajes del bebé y sus padres Murugupillai y Jenita.
El 26 de diciembre, cuando el "tsunami" arrasó las costas de Sri Lanka y mató en ese país a por lo menos 40 mil personas, el agua arrancó al bebé de los brazos de su madre.
Pocos días después los equipos de socorro encontraron al bebé en una playa cubierta por desechos y escombros y lo llevaron a un hospital, donde quedó identificado con el "número 81" por el orden de su llegada.
Poco después nueve parejas se presentaron al hospital y reclamaron al niño como suyo.
Fue tras pruebas de ácido desoxirribonucleico patrocinadas por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que se determinó quiénes eran sus padres biológicos.
La saga del "Bebé 81" y la reunión con sus verdaderos padres, transmitidas al mundo entero por la televisión enfocaron la atención sobre los padecimientos de decenas de miles de huérfanos y los peligros de los traficantes de menores.
ABC dijo que los padres y el bebé harán presentaciones públicas para reunir donaciones que ayuden a los damnificados en su país.
Jenita dijo que no quiere que se nombre al niño como "Bebé 81" ya que "ése es un nombre vinculado con la tristeza, la angustia".
La televisión mundial captó escenas, pocos días después del "tsunami", cuando Jenita irrumpió en el hospital para llevarse a su hijo después de que se entero sobre las reclamaciones de las otras ocho familias.
"Luché por mi hijo, eso es todo lo que hice", dijo en la televisión.
Murugupillai dijo que él y su esposa se alegraron de recuperar a su hijo pequeño, pero que les fue difícil estar contentos cuando a su alrededor sólo había tragedia, destrucción, pérdida de vidas y desaliento.
"No podíamos estar totalmente contentos con toda esa tristeza en torno a nosotros", dijo. "Tengo la esperanza de que volveremos a tener lo que teníamos. Queremos volver y tener una vida normal", añadió.
