EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- El oportuno descubrimiento que hicieron sus compañeros en rehabilitación así como la llegada de los socorristas de la Cruz Roja, fueron los factores determinantes para que un joven de 23 años de edad, no consiguiera quitarse la vida, luego que se cortó las venas en el interior del grupo San Pedro.
Ulises Ramos Guerrero, recluido para su rehabilitación desde hacer varios días en dicho centro de ayuda, intentó escapar por la puerta falsa tras cortarse las venas de las muñecas, con una navaja para afeitar.
El incidente se registró el pasado lunes, cuando en el interior de las instalaciones del Centro para Drogadictos del grupo San Pedro, localizado en calle Jiménez y avenida Juárez de esta ciudad, Ulises, quien lleva pocos días ahí recluido, hundido en una profunda depresión por la falta de droga, tomó la fatal determinación.
Con domicilio en calle López Mateos No. 31 de la colonia Nuevo Linares del Sur en Francisco I. Madero, el joven de apenas 23 años de edad, tuvo que ser trasladado por elementos de la benemérita institución hasta el Hospital General de la Secretaría de Salud para brindarle la atención médica necesaria que culminó al salvarle la vida.
Esto no hubiera sido posible de no ser por el oportuno hallazgo que hicieron sus compañeros en rehabilitación que de inmediato solicitaron la presencia y auxilio de los socorristas, toda vez que la incisión que se causó fue profunda y la hemorragia provocada puso en riesgo su vida.
Hasta el lugar también acudieron elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), a bordo de la unidad 3344, quienes también participaron en las labores de auxilio hacia el frustrado suicida.