EL SIGLO DE TORREÓN
MATAMOROS, COAH.- La dirección de Salud Municipal visitará la colonia Ignacio Zaragoza para verificar que en realidad opera un matadero clandestino como lo señalan habitantes del sector. Hace siete meses ya se había clausurado uno que al parecer es el mismo que se denunció ante El Siglo de Torreón.
Eduardo Huitrón Hernández, director de Salud Municipal, asegura que unos meses atrás, ya se había cerrado un matadero clandestino que al parecer también era de Antonio Velásquez Quistián, desconociendo si el recientemente encontrado es propiedad de la misma persona.
“Primero tenemos que verificar que ésta actividad se realice. A partir de ahí se hará un informe por escrito a la Jurisdicción Sanitaria número seis para que su personal del departamento de Regulación Sanitaria venga, constate y en su caso clausure”.
Luego de certificar el cierre del lugar, la dirección a cargo de Huitrón Hernández, volvió a acudir con su personal para desechar la posibilidad de una reapertura de actividades, comprobando que ésta ya no se practicaba.
“Sin embargo, no podemos saber a ciencia cierta si la matanza se realiza a diario, en la noche o en un momento oportuno para que nadie se percate de la situación. Esto es un problema de salud que se tiene que resolver”.
En caso de que se compruebe la actividad ilícita, la persona que aparece como presunto propietario podría acreditar una sanción y el cierre definitivo del lugar, misma que le corresponderá determinar a la autoridad sanitaria.
Hasta la fecha, la dirección de Salud Municipal no tiene conocimiento de otro matadero clandestino en la ciudad; si se comprueba que ésta es una reincidencia la sanción sería de mayores salarios mínimos que la anterior ocasión.
“Luego de comprobar las irregularidades, tendremos que coordinarnos con el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Simapa) porque con los desechos del matadero se tapan los drenajes; tenemos que hacer un saneamiento y analizar que otro tipo de problemas de salud han aparecido”.
El domingo pasado se publicó en El Siglo de Torreón la denuncia que vecinos de la colonia Ignacio Zaragoza hicieron de un matadero clandestino, al momento justo que de las alcantarillas empezaron a brotar aguas negras con tonalidades rojizas que hacían suponer sangre de los animales sacrificados.
Los habitantes comentaron que ese matadero ya tenía algunos años operando de manera ilegal y que ya no soportaban la situación. Ayer por la tarde, todavía algunos vecino hablaron a esta redacción para señalar que los olores son insoportables.
