Agencia Reforma
México, DF.- El sol de la isla de Anguilla avivó la llama de amor entre Brad Pitt y Jennifer Aniston...
Estos artistas decidieron recibir el año 2005 muy románticos en una prestigiada villa de esta isla del Caribe, que es conocida como un lugar de lujo de clase mundial, con playas espectaculares y donde se disfruta mucha tranquilidad.
La pareja de famosos ocuparon una de las cinco habitaciones del exclusivo resort Capitan?s Bays, en donde pasaron una semana por la que pagaron la cantidad de 100 mil dólares.
Aparentemente para la celebración de Año Nuevo no hubo fiesta ni baile, y optaron por una celebración romántica.
Con esto dejaron claro que se siguen amando y que si es que hubo problemas entre ellos el año pasado, ya quedó atrás.
Los actores fueron captados en varios momentos de su estancia en este paradisiaco lugar y siempre se les vio felices, gozando del clima soleado y nadando en las hermosas playas del lugar.
Uno de los días antes de que llegara el Año Nuevo salieron acompañados de sus amigos Courteney Cox-Arquette y David Arquette, con quienes una mañana tomaron un barco para ir a Sicilly Bay, un restaurante donde comieron.
El fin de semana Brad rentó una motocicleta y se fue solo a dar un largo paseo por la bahía, mientras su esposa aguardaba su llegada tomando el Sol.
A mediados del año pasado el diario británico Mail on Sunday publicó que la pareja podía estar al borde de la separación tras cuatro años de matrimonio, por una supuesta infidelidad de Brad con Angelina Jolie y porque, además, Jennifer se negaba a dejar su carrera temporalmente para tener un hijo.
Después, de acuerdo a los reportes de los medios, ella se embarazó pero perdió el bebé, provocando en Brad una intensa crisis emocional.
Hace poco más de un mes a Jennifer la captaron sin su argolla matrimonial en un evento público, lo que aumentó las sospechas de la posible separación.
Pero ahora los famosos callan todas las versiones con estas vacaciones que sirvieron para sellar una vez más el amor que los une.