Agencias
Los Ángeles, california.- El año pasado fue particularmente productivo para Kate Winslet. Además de ser madre nuevamente, participó en dos películas (Eternal Sunshine of the Spotless Mind y Finding Neverland) con las que obtuvo aplausos y aclamaciones en el ámbito internacional.
De todos esos reconocimientos el más importante ha sido la candidatura al premio Oscar que podría llevarse a su país natal, Inglaterra, el próximo domingo 27 de febrero.
Estrella de filmes de fuerte contenido dramático y literario, tales como Hamlet, Quills, Jude y The Life of David Gale, entre otros, Winslet dice sentirse completamente sorprendida por la nominación que una comedia con las características de Eternal Sunshine of the Spotless Mind le permitió obtener este año.
?Nunca hubiera imaginado que algo así ocurriría?, declaró con genuino entusiasmo Winslet minutos antes de entrar en el salón de banquetes donde se reunió con otros aspirantes a ganar un Oscar, en el evento anual organizado por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.
?Cuando estábamos en el rodaje de Eternal Sunshine? hablé en varias ocasiones con Jim Carrey, el actor con el que compartí créditos, para decirle que me parecía que se trataba de un filme lleno de maravillosas locuras y una desbordante imaginación y que, por eso mismo, no entendía por qué alguien en Hollywood se había atrevido a producirlo?.
?Jim nunca me dijo qué era lo que él pensaba. A lo mejor no compartía las inquietudes que yo tenía en esos momentos y prefería quedarse callado?.
?La verdad es que yo tenía puestas todas mis esperanzas en Finding Neverland, añadió la estrella de Titanic, la cinta más taquillera de todos los tiempos. ?Aunque no tuve suerte con ella, me puse muy alegre cuando supe que Johnny Depp, mi compañero en ese filme, fue considerado uno de los cinco mejores actores del año?.
Según Winslet, la postulación al Oscar es algo que ha estado tratando de disfrutar junto con toda su familia, particularmente con su esposo Sam Mendes, director de American Beauty y The Road to Perdition, quien le ha dado todo el respaldo y apoyo que necesita tener en estos momentos.
?Sam me ha dicho que debo permanecer tranquila y no pensar que voy a ganar o perder el Oscar?, aseguró ella. ?La verdadera importancia que tienen los premios es la confirmación que nos dan sobre el valor de nuestro trabajo. Todo lo otro que ocurre alrededor de ellos es totalmente relativo y circunstancial?.
?Ahora que puedo ver las cosas desde una perspectiva diferente, me doy cuenta que Eternal Sunshine of the Spotless Mind es un filme en el que nadie creía, excepto quienes lo estábamos haciendo. La única persona que reconoció su valor fue Sam, mi esposo. Él me dijo que se trataba de un proyecto cinematográfico con enorme originalidad, y que eso siempre era algo muy bien apreciado en Hollywood?.
?Después que tuvo la oportunidad de ver nuestra película, antes de estrenarse, Sam llegó a la conclusión de que Clementine Kruczynski, con todas sus locuras y la actitud que tiene, era el mejor de todos los personajes que yo había interpretado en mi carrera. El reconocimiento que se me dio vino a confirmar que sus apreciaciones eran correctas?.
Realizadas con muchos meses de diferencia, las dos películas estelarizadas por Kate Winslet fueron vistas por los miembros de la academia de Hollywood con similar interés y atención.
Acerca de lo que piensa sobre los misteriosos criterios que se aplicaron para nominarlas, en sus distintas categorías, explicó lo siguiente: ?Fue una coincidencia que estos dos filmes, tan diferentes en su contenido, se distribuyeran durante el mismo año. Todavía no acabo de entender muy bien cómo fue que eligieron a una chica tan liberal como Clementine en lugar de a la discreta y gentil viuda Sylvia Llewelyn, de Finding Neverland. Normalmente los premios Oscar son entregados a filmes dramáticos. Sin embargo, pienso que gracias a Eternal Sunshine of the Spotless Mind tengo las mismas oportunidades que las otras actrices que están nominadas en la misma categoría que yo?.