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México, DF.- El actor estadounidense Kevin Bacon lucha por controlar sus instintos pederastas en la cinta Un Crimen Inconfesable (2004), excelente argumento que captura una de sus mejores interpretaciones.
El histrión, reconocido por su talento en películas como Murder in the First, Digging to China o Mystic River, entre otras, desarrolla en ésta, la ópera prima de Nicole Kassell, uno de los mejores trabajos dramáticos que hasta ahora se le han visto. Lo anterior, sin tomar en cuenta que ya se le considera como uno de los más destacados de su generación dentro del cine de Hollywood.
El impecable esfuerzo de Bacon logra que el espectador crea fielmente en la historia e incluso, le hace padecer los más íntimos sentimientos de su personaje Walter, un ser confundido que recién egresó de una prisión estatal tras cumplir una condena de 12 años por abuso sexual a una menor.
Todo aquel que acuda a ser testigo de esta proyección recorrerá junto con Bacon las calles que Walter caminará en busca de la reivindicación para darle un nuevo sentido a su vida. Los años que el protagonista de la historia pasó en la cárcel, lo convirtieron en un ser arrogante, pero que no deja de luchar contra las cicatrices que le han quedado en su interior.
Él está decidido a cambiar su comportamiento sexual mediante terapias. Sin embargo, un apartamento que alquila frente a un colegio de niños pondrá a prueba sus más ocultos intereses, pero al mismo tiempo, se sentirá perseguido por sus culpas y por la desconfianza de las personas más cercanas como su hermana y su cuñado. Todo esto será aguardado por el miedo latente de que más gente se entere de su pasado.
En su reciente acontecer aparece Vickie, una mujer fuerte y decidida que lo ayudará a ver las cosas con otro enfoque, más cuando ella también oculta fuertes golpes de su pasado. Cuando se cree que las cosas marchan en orden y sin problemas, Eve, una secretaria que labora en el mismo lugar que Walter, se empeña en descifrar su pasado, al igual que un extraño policía Lucas, que tiene como fin poner al descubierto su verdadera historia.
Un Crimen Inconfesable (The Woodsman) es un guión inteligente que está basado en la adaptación de la obra de teatro de Steven Fechter, quien escribió la trama junto con la directora.
Ambos consiguen de manera brillante transmitir la indecisión de Walter entre hacer el bien para comenzar de nuevo o recaer en sus faltas, con un pasado que lo persigue en todo momento. Nicole Kassell también examina de forma desafiante su vida e intenta mostrar el lado humano de Walter, personaje pedófilo que como en otras películas, se clasifica como un monstruo al igual que matones y asesinos seriales.
En el filme estadounidense producido por Lee Daniels y Kevin Bacon, llegará a las salas de México a partir de este viernes y participan en la fotografía Xavier Pérez Grobet y en la música Nathan Larson. Se plasma además, el talento actoral de Kyra Sedgwick, Mos Def, Benjamin Bratt, David Alan Grier y Kevin Rice, por citar algunos.
La cinta estuvo nominada en este año al premio Independent Spirit. En 2004 ganó el premio otorgado por la sociedad de críticos de cine de Boston, así como la presea especial del jurado en el festival de cine de Deauville.
