El enrojecimiento de ciertas áreas del cuerpo puede ser señal de un ataque de dermatitis atópica.
Una sobrerreacción de las defensas naturales desencadena este padecimiento; se puede atacar con fármacos modernos y prevención.
El enrojecimiento de ciertas áreas del cuerpo, especialmente en las zonas sensibles de la piel, como cara, cuello y pliegues, así como una comezón intensa y repetitiva en las mismas, pueden ser señales de un ataque de dermatitis atópica.
Y es hora de consultar al dermatólogo.
Cuando este mal tiene a los menores como blanco es urgente acudir al especialista.
El médico dermatólogo Jorge Ramírez dice que se estima que en la consulta al especialista se descubre que 80% de los casos de dermatitis atópica se da en niños y el 20% restante en adolescentes y adultos, por lo que no es un mal exclusivo de infantes.
Advierte que se trata de un padecimiento crónico y recurrente que surge por ciertos factores químicos, ambientales y/o genéticos.
La dermatitis atópica es una enfermedad controlable, ya que existen tratamientos para mantenerla alejada.
Indica que en el arsenal médico se cuenta con Pimecrolimus, que puede ser aplicado en niños desde los primeros seis meses de vida y ser utilizado con seguridad en cualquier parte de la piel, aún en áreas delicadas y por tiempo prolongado, previniendo la aparición de dermatitis atópica hasta por un año.
Mal recurrente
El especialista dice que se trata de un padecimiento recurrente que llega a afectar la autoestima y calidad de vida de quien lo sufre, por lo que es necesario contar con la opinión de los expertos para el tratamiento de cualquier enfermedad de la piel, ya que son ellos quienes con base en un estudio pueden detectar las causas de la enfermedad.
De acuerdo con expertos, la dermatitis más común es la atópica, aunque es frecuente la aparición de la llamada alérgica, que puede deberse a reacciones alérgicas a animales y otras sustancias.
La dermatitis por contacto es una inflamación de la piel; también existe la dermatitis seborreica y la dermatitis de pañal, que es una erupción que aparece en un área anatómica especialmente expuesta a sustancias irritantes: En la zona del pañal del niño se suman factores de oclusión, rozamiento, humedad, y la acción directa irritante de la orina sobre la superficie cutánea. Las heces también juegan un papel irritante debido a diversas enzimas que contienen.
Es bueno que a partir de un tratamiento médico como el Pimecrolimus se tomen en cuenta una serie de precauciones para mantener la dermatitis atópica alejada.
