NUESTRA REALIDAD
Sociedad|El problema se presenta sobre todo en familias disfuncionales.
EL SIGLO DE TORREÓN
Si el padecimiento no es atendido se generan depresiones y ansiedad en la vida adulta.
TORREÓN, COAH.- El trastorno por déficit de atención en los niños se clasifica en con y sin hiperactividad, dice el psiquiatra, Fernando Buendía Cano, enfermedad que se refiere a un porcentaje de menores que tienen incapacidad para fijar su atención correctamente, y a esto se agrega una serie de síntomas que los hacen ser disfuncionales.
?Si un niño a edad temprana no puede poner atención, se pierde de los conocimientos primarios más básicos, que debe aprender?, manifiesta, ?aparte de que tienen mucha impulsividad, son niños sumamente inquietos con tendencia a romper las reglas establecidas, con inquietud constante a cambiar de lugar, que toman los objetos de otras personas, aunque no necesariamente con malas intenciones?.
Explica que la falta de atención no permite a estos pequeños tener un buen desempeño académico, pero también pierden aprendizaje en cuestiones de la vida común como las reglas morales, lo que se debe y no hacer, se crea una dificultad importante para educarlos y conducirlos, pues el trastorno se traduce a un desorden de conducta.
?El niño con problemas por déficit de atención tiende a oponerse y tiene problemas con sus padres, maestros, y compañeros, se convierte en una amenaza y es entonces cuando se ejercen estrategias para reprimirle, cuando no existe un entrenamiento correcto y un conocimiento claro de lo que se debe hacer?, comenta.
Los pequeños que padecen este trastorno tienen problemas de aprendizaje y conducta, son relegados socialmente y constantemente castigados por sus padres. Aunque no hay una causa establecida, lo que más se aproxima es que los menores tienen alteraciones múltiples, como la genética o los factores ambientales, pues se dan generalmente en familias disfuncionales o que tienen muy laxa su disciplina.
?Muchos niños pasan gran parte de su educación sin ser diagnosticados ni tratados correctamente y el hueco que deja ese tiempo no se puede llenar y los conocimientos que debieron adquirirse no se adquieren?, indica, ?se sabe que estos niños tienen más probabilidad de consumir drogas, alcohol, cometer algún crimen, como parte de su proceso de no aprender y su impulsividad?.
Buendía Cano señala que parte de la importancia de tratar el trastorno con déficit de atención, se debe a que en la vida adulta, este padecimiento predispone a depresiones, ansiedad y consumo de sustancias.
Recomendaciones.
El psiquiatra, Fernando Buendía Cano, considera que los padres de familia deben mantenerse muy atentos a que su hijo tenga un desarrollo normal y el aprendizaje correcto. Por ello, recomienda detectar el trastorno por déficit de atención temprano y tratar al niño correctamente.
* Observar criterios como que el menor no se pueda estar quieto, no espera su turno, es temerario, arrebata cosas, tiene incapacidad para fijar más de diez segundos su atención, es oposicionista, con tendencia al berrinche.
* El académico refiere que el infante con trastorno por déficit de atención requiere de un plan de conducta específico y bien diseñado, acudir al especialista y proporcionar los medicamentos necesarios que, lejos de ser ?represores?, ayudan a que el menor fije su atención correctamente y baje la impulsividad y la inquietud.
* Tomar en cuenta que este trastorno no termina en la adolescencia, sino que puede prolongarse por toda la vida del individuo y causa los mismos daños a un niño que a un adulto, que tiende a las adicciones, es inestable en el trabajo y con sus parejas, tiene disfunción familiar, incapacidad para iniciar y terminar una tarea.
FUENTE: Fernando Buendía Cano, psiquiatra