(Segunda parte)
El general organizó a los campesinos en grupos y finalmente en ligas campesinas que en representación de sus afiliados tramitaban todos sus solicitudes. El Gobierno del Estado trató por todos los medios posibles de desconocerlas, más aún cuando formó la ?liga regional de comunidades agrarias? que inscribió como parte de Partido Nacional Agrarista. Cambió el fusil por su actividad política en bien del campesino y el obrero, ya que formó también ?la Federación de Obreros y Campesinos?. En 1923, en Monclova fue el ?primer Congreso Campesino del Estado de Coahuila?.
En 1930, hubo choques con el gobernador obregonista Nazario Ortiz Garza que dio por concluido el reparto cuando sólo se habían constituido once ejidos en el Estado.
Por sus nexos con el movimiento obrero nacional, ingresó al Partido Comunista de México del cual era presidente Diego de Rivera que por su apoyo a León Trotsky fue expulsado; el partido postuló en 1929. Al general Pedro V. Rodríguez Triana como candidato a la Presidencia de la República contra Pascual Ortiz Rubio y José Vasconcelos, lo cual le trajo muchos problemas en el Estado donde el Banco Nacional de Crédito Agrícola ponía todo tipo de trabas a sus afiliados; en Viesca, formó los ?Cudes? (Colonias Unidas de Santiago) una colonia agrarista y que por ello, terminó en renuncia al Partido Comunista pero siguió luchando siempre por sus obreros y campesinos.
La pacificación del país iniciada por Obregón y Calles, la consiguió Lázaro Cárdenas. Los hacendados formaron la ?Asociación de Hacendados de la Comarca Agrícola? para oponerse a la ?Organización de Cámaras Agrícolas? que iniciaron una huelga general. El seis de octubre de 1936, fue el reparto agrario terminando así con el problema transitoriamente.
Cárdenas permaneció en La Laguna varias semanas y designó como su ?brazo derecho? al general Pedro V. Rodríguez Triana a quien nombró Gobernador del Estado de Coahuila 1936-41.
GESTIÓN GUBERNAMENTAL DEL GRAL. RODRÍGUEZ TRIANA
Como gobernador comprendió que ningún pueblo puede progresar sin cultura y a ello encaminó sus mayores afanes. Fundó las escuelas prácticas de agricultura para formar técnicos agrícolas, las escuelas primarias con internado complementario para los hijos de los campesinos y ?los hijos del ejército?, en San Pedro se abrió la Escuela Secundaria y Prevocacional, la escuela Ladislao Covantes, la escuela agrícola Agua Nueva, en Viesca la Escuela Superior de Agricultura y Ganadería; en Torreón habilitó 28 hectáreas para construir el bosque Venustiano Carranza y en frente la Universidad de La Laguna que se convertiría en nuestra Escuela y Preparatoria Venustiano Carranza. Finalmente reglamentó los estatutos del futuro sindicato de maestros.
Fue guardián celoso del reparto y de los préstamos de avío del banco, del mejoramiento y cuidado del sistema de riego, inició la red de carreteras de La Laguna y en general mantuvo siempre el agrarismo.
SU OCASO
Lógicamente todo hombre grande y público tiene enemigos. Lo llamaron comunista, ignorante, etc. y cuando el general Cárdenas terminó su periodo, llegó la política de derecha personificada por el general Manuel Ávila Camacho que ?venció? a Almazán y con su frase: ?Yo soy creyente?, satanizó todo lo que fuera comunismo y Rodríguez Triana era eso. Comenzaron todo un sinfín de problemas, guardias fuera de su casa, las fuerzas militares tomaron el Palacio de Saltillo, los políticos de derecha se apoderaron del Banco Ejidal y renunció al saber que el general Benecio López sería su sucesor.
La política de derecha y el anticomunismo tomaron las riendas. La venganza es dulce y comenzó el desmantelamiento de ejidos y el fortalecimiento de la pequeña propiedad. Así siguieron las cosas aún cuando Miguel Alemán continuó el Gobierno de derecha.
En 1960, finalmente, en su casa de la calzada Colón y Abasolo, falleció el general don Pedro de V. Rodríguez Triana.
El general don Lázaro Cárdenas asistió a despedir a su amigo ejemplo de honradez, de fidelidad a sus ideales y al amor por su tierra y por su gente. Su querida Viesca, Coahuila, fue su última morada.