POR DIANA JANETH GONZÁLEZ ROLDÁN
EL SIGLO DE TORREÓN
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- Corrupción en las corporaciones policiacas es lo que denuncian los habitantes y las autoridades del ejido Hidalgo donde la venta de droga y cerveza clandestina parece que se adueñó de sus calles sin que nadie pueda frenar la expansión de estos negocios ilícitos cuyos propietarios burlan la Ley, según los señalamientos.
?Los policías municipales, estatales y ministeriales, saben en dónde se vende pero nomás van por el ?moche? y así no hay quién pueda detener eso, no hay ningún control, incluso varias veces se han hecho señalamientos directos pero las autoridades no hacen nada porque están vendidas?, afirma Pablo Valenzuela Gress, secretario del comisariado ejidal.
En Hidalgo la mayoría de los habitantes tiene conocimiento de la ubicación de las casas que han sido adaptadas como cantinas sin ningún permiso y donde la venta se hace prácticamente a cualquier hora. La llamada venta clandestina ha dejado de serlo, pues lejos de estar oculta o escondida, se hace a plena luz del día sin que ninguna autoridad moleste a los dueños a no ser que acudan por sobornos, según el secretario.
?En una ocasión me dijeron que no podían entrar a los domicilios y llevarse la cerveza pero cómo sí pueden pedir dinero a cambio de no molestarlos?, comenta Valenzuela Gress, quien afirma que en varias ocasiones le han preguntado si no tiene miedo de hacerle frente a este problema.
?Tengo más miedo de ver que chamaquitos de la edad de mis nietos ya andan en la droga y de los pleitos que se originan con tanta venta de alcohol, ya estamos hartos de que no nos escuchen porque parece que la Ley nada más la podemos hacer valer nosotros aunque mucha gente tiene miedo a las represalias?, señala el secretario, pues además afirma que tres jóvenes han muerto por la drogadicción.
Otra señora (que se negó a dar su nombre por temor) afirma que los domingos es cuando más ?se dan vuelo? porque cierran la cantina ejidal y el expendio, que son los únicos que cuentan con permiso. Los habitantes dicen que cuando hay trifulcas la Policía llega tarde o no llega.
?Es uno de los ejidos más problemáticos porque el comisariado y la gente es alcahueta con los hijos, cuando vamos en operativos la gente nos apedrea y nos baja a los muchachos a la fuerza. Muchas veces son mujeres las que se meten y no podemos darles un golpe además se necesitan más denuncias formales?, señala el comandante operativo de la DSPM, Rodolfo Vitela, quien afirma llevarse cinco patrullas durante los operativos.
LAS CORPORACIONES
Para el director de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, Fernando Maldonado Díaz, el problema radica en que las personas del ejido protegen a los muchachos que por lo regular tienen entre 14 y16 años de edad además de que la población se ha incrementado. Reconoció además que el personal con el que cuenta es insuficiente para concluir el trabajo tanto en la zona urbana como en la rural, pues tienen 78 elementos de los cuales se dividen en 28 ó 30 por turno que deben vigilar la ciudad y los ejidos. También por turno se cuenta con sólo siete patrullas siendo 14 en total, sin contar las cuatro de vialidad, cuatro cuatrimotos y cuatro bicicletas. ?Necesitamos mínimo un 50 por ciento más de elementos?, señaló Maldonado Díaz.
El comandante de la Policía Estatal, Sergio Luévanos Gress, aseguró también que no existen denuncias formales y que los mismos habitantes los solapan, por lo que es raro que existan señalamientos directos. ?El comisariado debe involucrarse más, hay que dar nombres y direcciones porque con tantos ejidos no nos damos abasto?, acotó Luévanos Gress. Actualmente la Policía Estatal ha hecho dos consignaciones a raíz del clandestinaje.
Al parecer lo único que podría poner freno a esta situación sería una mayor efectividad de las corporaciones policiacas, denuncias formales, operativos y consignaciones.
Recientemente no se han realizado operativos donde participen todas las corporaciones policiacas incluyendo la PGR.
Poca participación
La situación en el ejido Hidalgo dista mucho de ser un caso aislado, el problema de la venta de drogas y del clandestinaje atañe a muchos otros ejidos circunvecinos como lo es el ejido Aguanavista, donde el propio comisariado, Alejo Rodríguez, afirma que este problema también predomina en el ejido antes mencionado.
Sin embargo, dijo que los habitantes se mostraban apáticos cuando se les llamaba a juntas para luchar contra el clandestinaje y que lo que son los elementos de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) jamás se aparecen ni realizan investigaciones para contrarrestar el ?narcomenudeo?.
?Los habitantes e incluso las autoridades ejidales estamos desprotegidas, pues ante una denuncia que cualquiera de nosotros haga, quién está ahí de las corporaciones para defendernos si hay represalias?, afirma el comisariado del ejido Aguanavista.
Demasiados
En el ejido Hidalgo legalmente sólo existe un expendio y una cantina que cuenta con sus permisos y que entregan una cantidad semanal, que en el caso de la cantina es de 350 pesos que el comisariado utiliza para dar apoyos en cuestión de la alimentación de la doctora de la clínica del IMSS que no percibe sueldo, según afirma el secretario ejidal, Pablo Valenzuela Gress.
*En Hidalgo hay aproximadamente cinco mil habitantes.
*Siete cantinas clandestinas donde se vende cada cerveza de las llamadas caguamas en 15 ó 10 pesos.
*Cuatro domicilios donde se vende droga-
FUENTE: Vecinos del lugar
