EXPLORARÁ EL PLANETA ROJO DURANTE CUATRO AÑOS.
La Sonda Orbital de Reconocimiento de Marte (MRO), equipada con la mayor cámara telescópica jamás enviada a otro planeta, llegará en marzo de 2006.
Cabo Cañaveral, (Notimex).- La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) lanzó desde aquí la Sonda Orbital de Reconocimiento de Marte, en la misión de exploración más extensa intentada por el hombre para saber más del Planeta Rojo.
El despegue se produjo a las 07:43 horas locales (13:43 GMT) desde el Centro Espacial Kennedy luego de dos días de retraso y a tres después del regreso del transbordador Discovery a la Tierra, en la continuación del programa de conquista del espacio de la NASA.
La sonda MRO despegó impulsada por el cohete Atlas V y el viaje tomará siete meses, al cabo de los cuales requerirá otros seis para situarse en órbita, donde permanecerá unos cuatro años, informó la NASA en un comunicado.
El cohete propulsor cayó en el Atlántico minutos después del lanzamiento y luego un segundo cohete propulsor se encendió para continuar con el ascenso.
George Diller, comentador de la NASA, dijo que la sonda surcaba el infinito "para investigar en los más profundo de la misteriosa evolución de Marte".
La sonda no tripulada orbitará por unos cuatro años el Planeta Rojo, tiempo en el que tomará fotografías que proverán información sin paralelo sobre el clima y la geología marciana, que pueden ayudar a la exploración humana futura del misterioso planeta.
La NASA prevé que la sonda se coloque en una órbita desde la cual podrá utilizar una vasta gama de instrumentos para estudiar el clima, la geología y los aspectos meteorológicos de Marte, incluso para preparar futuras misiones tripuladas.
El aparato estará en órbita a 300 kilómetros de la superficie marciana y comenzará en noviembre de 2006 a enviar un flujo sin precedentes de datos, gracias a sistemas de transmisiones de última generación.
La sonda además debería convertirse en plataforma para las comunicaciones en futuras exploraciones marcianas.
La misión, valorada en 720 millones de dólares, está dividida en dos partes. Durante los dos primeros años la sonda ayudará a la NASA a construir la base de datos del planeta, del cual se sabe que es frío y seco con grandes capas de hielo.
Los científicos de la NASA creen que fue un lugar húmedo y cálido en alguna época, condiciones que pudieron haber albergado algún tipo de vida.
Equipado con un gran telescopio capaz de fotografiar una mesa a 320 kilómetros de distancia, la sonda enviará imágenes del planeta jamás tomadas.
Las fotos permitirán a la NASA escoger el lugar para en un futuro buscar el aterrizaje de dos robots exploradores, el Phonix Mars Scout en 2007 y el Mars Science Laboratory dos años después, que serán lanzados en la búsqueda de compuestos químicos u orgánicos.
En la segunda fase de la misión, la sonda servirá de comunicador entre los robots exploradores y Marte y la Tierra.
La antena que lleva la sonda puede transmitir 10 veces más información por minuto que el trío de antenas que en la actualidad la NASA tiene posicionadas alrededor de Marte.
Entre otros instrumentos que permitirán a la sonda recoger datos, hay un sofisticado radar, el Sharad, que permitirá determinar la presencia de agua o hielo hasta un kilómetro bajo la superficie del planeta.