Hasta ahora los médicos sólo recetan aspirinas a los pacientes con un riesgo superior al tres por ciento de padecer infarto o apoplejía por miedo a los efectos secundarios de este medicamento.
Londres, (EFE).- Tomar una aspirina diaria a partir de los cincuenta años puede prevenir el infarto y la apoplejía, según un estudio de la Universidad de Cardiff (Gales) que publica el "British Medical Journal".
Un remedio tan barato como tomar una aspirina todos los días podría prevenir un cuarto de los ataques al corazón y derrames cerebrales, además de reducir el riesgo de desarrollar Alzheimer y algunos tipos de cáncer, como el de pulmón, el de colon o el de próstata.
En una conferencia organizada en Londres por la "Fundación de la Aspirina", apoyada por varias empresas farmacéuticas, Peter Elwood, catedrático de la universidad galesa, aseguró que "si todo el mundo siguiera ese consejo, se salvarían decenas de vidas cada año y casi sin ningún coste".
Elwood recordó que hasta ahora los médicos sólo recetan aspirinas a los pacientes con un riesgo superior al tres por ciento de padecer un infarto o una apoplejía en los próximos cinco años por miedo a los efectos secundarios de este medicamento.
El estudio, sin embargo, señala que esos efectos, como los problemas de estómago o las hemorragias, sólo aparecen en dos o tres casos de cada mil, por lo que recomienda a los médicos de cabecera que receten aspirinas a todos sus pacientes con más de cincuenta años.
Para elaborar este informe, los científicos de Cardiff han seguido la evolución de dos mil 500 galeses durante 25 años que por su edad, hábitos, presión sanguínea y niveles de colesterol tienen riesgo de padecer un ataque al corazón o un derrame cerebral.
Cada año, cerca de trescientos mil británicos sufren un infarto y ciento treinta mil una apoplejía, y en sesenta mil casos las consecuencia son mortales.