Los exportadores reportan pérdidas económicas con el cambio de dólares
a moneda nacional.
Notimex
MÉXICO, DF.- La fortaleza del peso frente al dólar es un síntoma de la confianza de los inversionistas, pero este comportamiento en el mercado cambiario afecta al sector exportador, al perder rentabilidad en sus ventas al exterior, señaló el presidente de la Canacintra, Cuauhtémoc Martínez García.
El dirigente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) dijo que varios sectores productivos con alta actividad exportadora, como el automotriz, la confección y el textil, reportan pérdidas al momento de hacer el cambio de dólares a pesos, por lo que les recomendó ampliar su mercado interno.
La fortaleza que registra en la actualidad el peso mexicano tiene diferentes efectos sobre la actividad económica del país, ya que por un lado incide negativamente con las empresas altamente exportadoras, que ven como sus ventas al exterior pierden rentabilidad.
Sin embargo, continuó, la actual cotización del tipo de cambio resulta favorable para importadores tanto de bienes terminados para su correspondiente venta o de insumo o materias primas, pues pagan menos pesos al cubrir precios tipificados en dólares.
“Aquí hay, como suele ocurrir en todas las veces, dos lecturas según sea el lado donde se trabaja, porque del lado de exportaciones puede ver alguna afectación al quedar fortalecido el peso y quitarle competitividad a algunos productos, pero por otro lado, a productores nacionales es bueno, porque les eleva su rentabilidad”, explicó.
Importadores
Señaló que en el caso de importadores, el hecho de que el dólar se venda en 10.77 pesos en promedio representa una oportunidad, en especial para comprar bienes de capital como herramientas o maquinaria, ya que el desembolso resulta menos costoso de lo que tendrían que hacer cuando la divisa anda en niveles de 11.50 pesos.
“Aquí una recomendación, es sobre todo para la adquisición de bienes de capital, que son los bienes para producir, como maquinaria, pero tampoco irnos con la idea errónea de que esto será duradero a la baja, porque entonces sí podría darse un descalabro, porque es una cuestión temporal”, mencionó. Para el caso de los exportadores mexicanos, señaló que esta coyuntura debe representar un aliciente para buscar ampliar su participación en el mercado interno, con el objetivo de compensar los efectos derivados por la fortaleza del peso sobre las ventas mexicanas al exterior.
El dirigente empresarial descartó que el tipo de cambio alcance niveles por debajo de 10.60 pesos, por lo que no avizora fuertes desequilibrios para los exportadores mexicanos.
Señaló que el pronóstico está sustentado en el hecho de que existía una sobrevaluación del dólar frente al peso mexicano, por lo que la divisa se coloca en niveles más reales acorde al mercado.
De cualquier manera, subrayó que la actual cotización es un síntoma de confianza en cuanto al desempeño de la economía mexicana, lo cual también se puede confirmar, dijo, en el desempeño que han mostrado otras indicadores, como el Indice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa de Valores, que ha alcanzado niveles históricos.
El balance
El peso mexicano cerró ayer en su mayor nivel en casi dos años, favorecido por el ingreso de capitales atraídos por los rendimientos reales de los valores gubernamentales.
El peso ganó 0.28 por ciento a 10.5830 por dólar, su mejor nivel desde el 30 de julio de 2003.
El diferencial entre los rendimientos primarios que ofrecen los títulos de deuda interna y los de los bonos extranjeros genera un amplio flujo de divisas en México.
El peso en su valor referencial 48 horas ganó tres centavos a 10.5805/10.5830 por dólar, su mejor nivel desde el 30 de julio de 2003, cuando finalizó en 10.4620 por divisa estadounidense.
“Seguimos teniendo un alto premio real en pesos, los meses de mayo, junio y probablemente julio tengamos los niveles más altos de tasas real; por otro lado, el diferencial entre tasas de Estados Unidos y México sigue siendo muy alto”, dijo Roberto Galván, director de la consultora Vanguardia Investment.
“México es ahora un foco de atracción para los inversionistas internacionales por las altas tasas de interés que pagan los instrumentos de deuda, lo que ha permitido que el peso se haya fortalecido a los niveles que tenía hace casi dos años”, dijo el Grupo Financiero Monex.
El Certificado de la Tesorería (Cete) a 28 días, la tasa primaria de referencia, se mantiene desde hace tres semanas en 9.61 por ciento.
Desde principios de junio, la tasa líder a 28 días ha registrado descensos marginales e incluso se ha mantenido intacta en algunos remates, considerando la caída en los precios al consumidor en mayo y junio.
“Aquí hemos tenido una lentitud en las bajas de las tasas de interés domésticas y es muy probable que toquemos el nivel de 10.50 por dólar”, estimó Galván.
En ventanillas de casas de cambio en México, el dólar se cotizaba ayer en promedio a la compra en 10.5100 pesos y a la venta en 10.7600 pesos por divisa estadounidense.
El peso a 24 horas se apreció 3.05 centavos a 10.5740/10.5780 por dólar, mientras que en su valor mismo día registró una ganancia de 2.80 centavos a 10.5700/10.5800 por divisa estadounidense.
A continuación se presentan algunos datos sobre el comportamiento del peso mexicano durante la jornada de ayer.
- El peso mexicano logró cerrar en su mayor nivel en casi dos años, favorecido por el ingreso de capitales atraídos por los rendimientos reales de los valores gubernamentales.
- La moneda mexicana ganó ayer 0.28 por ciento a 10.5830 por dólar, su mejor nivel desde el 30 de julio de 2003.
- El diferencial entre los rendimientos primarios que ofrecen los títulos de deuda interna y los de los bonos extranjeros genera un amplio flujo de divisas en México.
- Las proyecciones de especialistas señalan que para finales del año podría cerrar a 10.5 pesos por dólar.
- Para fines de 2006, el pronóstico continúa en 11.4 pesos por dólar.
FUENTE: Agencias