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LIMA, PERÚ.- La animadora de televisión peruana Laura Bozzo abandonó ayer la televisora capitalina donde cumplió arresto domiciliario por tres años y celebró su libertad con una reunión familiar en un exclusivo hotel capitalino.
La autodenominada ?abogada de los pobres? abandonó la madrugada de ayer las instalaciones de la televisora Monitor, donde estuvo detenida y realizaba las grabaciones de sus programas de ?talk show?, que se difunden a varios países de la región.
Acompañada de ejecutivos de Telemundo, cadena estadounidense para la cual trabaja, Bozzo enfrentó a los periodistas a la salida de Monitor e insistió en su inocencia por los cargos de corrupción en su contra y dijo que ?no he cometido delitos, sólo errores?.
La comunicadora de 54 años de edad pidió ?cerrar el capítulo? sobre el juicio en su contra y terminar ?con los rencores?, tras lo cual se trasladó al lujoso hotel Marriot para reunirse con familiares y amigos personales.
Bozzo, quien está impedida de salir del país, dijo que su mayor error fue involucrarse en política, debido a que fue acusada de recibir dinero de manos del ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos, para apoyar la reelección de Alberto Fujimori.
La conductora rechazó haber pertenecido a la red de corrupción que encabezó Montesinos durante el régimen de Fujimori (1990-2000), aunque admitió que estuvo enamorada del ex jefe del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), sin ser correspondida.
?Fui una estúpida por meterme en la política, pero nunca más lo haré?, manifestó la polémica animadora de televisión, a quien la Tercera Sala Anticorrupción decidió cambiar la orden de arresto domiciliario por la de comparecencia.
Bozzo recuperó este domingo su libertad después de 36 meses bajo arresto domiciliario sin recibir sentencia, aunque deberá cumplir una serie de medidas de buena conducta.
La conductora televisiva deberá firmar el libro de control cada 15 días, dar cuenta de sus actividades, tendrá la obligación de concurrir a las citaciones y no cambiar de domicilio sin previa autorización.
La Procuraduría de Perú, sin embargo, indicó que existen elementos suficientes para revertir el fallo y sostuvo que la revocatoria de detención domiciliaria para Bozzo ?no equivale a su inocencia?.
El abogado del Estado peruano, Juan Carlos Portocarrero, negó que exista ?un afán de venganza? por parte de la Procuraduría, sino que sólo busca esclarecer el caso y que Bozzo no eluda la justicia peruana.