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LIMA, PERÚ.- La animadora de televisión de la cadena estadounidense Telemundo, la peruana Laura Bozzo, pidió al Poder Judicial de Perú levantar la orden de arresto domiciliario en su contra en el marco de un proceso criminal por corrupción.
"Yo no pido la absolución, sino la libertad bajo comparecencia", manifestó Bozzo en una audiencia pública ante la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema para explicar las razones de su petición, por segunda vez.
Bozzo, abogada de 53 años, es procesada por los delitos de falsedad, complicidad en peculado y asociación ilícita para delinquir, pero la conductora sostiene que se trata de una venganza de parte del presidente peruano Alejandro Toledo.
La justicia acusó a Bozzo de haber recibido dinero de manos del ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos para llevar a cabo una campaña de descrédito contra los opositores al régimen del presidente Alberto Fujimori (1990/2000), quien está refugiado en Japón.
La autodenominada "Abogada de los Pobres" reiteró su inocencia al señalar que a lo largo de su proceso no se ha mostrado prueba alguna de que habría recibido tres millones de dólares para apoyar la reelección de Fujimori.
Bajo arresto domiciliario desde julio de 2002, por presuntos vínculos con la red de corrupción que encabezó Montesinos, Bozzo aseguró haber mantenido una conducta intachable en los 30 meses privada de su libertad.
El procurador adjunto César Pantoja, por su parte, pidió al tribunal anticorrupción confirmar el arresto domiciliario que Bozzo cumple en un canal de televisión, debido a que no presentó nuevas pruebas que hagan variar su situación procesal.
La Fiscalía ha solicitado la ratificación de la detención domiciliaria ante el riesgo de que se fugue del país y consideró que la popular animadora de los programas de "talk show" de la cadena Telemundo debería ser condenada a seis años de cárcel.
