EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En el hospital acabó Clemente Pérez Paniagua, luego de la parranda que corrió la noche anterior en la que peleó con una persona de la que no se acuerda y resultó con dos heridas punzo cortantes que lo mantienen bajo observación médica.
Con 30 años de edad, domiciliado en manzana cuatro, lote 20 de la colonia Zaragoza Sur, Clemente presentó una herida producida por instrumento punzo cortante en región dorsal paravertebral con diez centímetros de profundidad, así como otra en el brazo izquierdo, cara anterior que interesó músculo y una más por dermoabrasión.
De acuerdo a lo manifestado por la hermana del lesionado, Perla Pérez Paniagua, de 31 años y con la misma dirección, Clemente había estado ingiriendo bebidas embriagantes desde la noche anterior.
Señaló que a eso de las cuatro de la madrugada estuvo bebiendo con César Pérez Salazar, de 52 años y Edmundo Hernández, de 38, padre y tío, respectivamente, de ambos, en las afueras de su casa. Ellos también habían iniciado la juerga desde la noche anterior.
Transcurrió poco más de una hora para que Clemente, quien ya andaba en completo estado de ebriedad, se introdujera a su domicilio, diciéndole a Perla que se iba a acostar ya, pues lo habían picado y al ver que estaba sangrando, decidió trasladarlo a la clínica 16 del Seguro Social, a bordo de un taxi.
En el trayecto al hospital, Clemente le dijo a su hermana no acordarse quién lo había lesionado, por lo que una vez que fue atendido por los médicos, quedó internado para su convalecencia.