AP
KABUL, AFGANISTÁN.- Los militares estadounidenses liberaron ayer a unos 80 prisioneros detenidos en Afganistán, una acción que podría ayudar a persuadir a los simpatizantes del régimen terrorista del Talibán para renunciar a su lucha insurgente.
Dos autobuses trasladaron a los prisioneros, todos hombres afganos, de la principal base estadounidense en Bagram a la Corte Suprema en Kabul. Las autoridades informaron que los presos fueron luego llevados a una terminal de autobuses, para emprender el regreso a sus casas.
Un asesor del presidente Hamid Karzai dijo, a condición de permanecer anónimo, que los prisioneros eran retenidos en Bagram, dentro de una base estadounidense en la ciudad sudoriental de Khost, o en Kandahar, en el Sur.
Inicialmente, los funcionarios del tribunal superior anunciaron que los presos estaban en la cárcel de la Base Naval estadounidense en Guantánamo, Cuba, pero más adelante desmintieron la versión.
Las fuerzas estadounidenses y sus aliados capturaron a miles de presuntos miembros del Talibán y de Al Qaeda en Afganistán, durante los bombardeos que derrocaron al régimen fundamentalista a finales de 2001.
Cientos de detenidos han sido considerados “combatientes enemigos” y fueron transferidos a Guantánamo. Muchos otros permanecen en bases estadounidenses dentro de Afganistán.