EFE
LONDRES,INGLATERRA.- El cantante Pete Doherty, novio de la modelo Kate Moss, fue ayer puesto en libertad tras ser detenido el sábado en una operación antidroga practicada tras actuar con su banda, Babyshambles, en Shrewsbury (centro de Inglaterra).
Doherty, de 25 años y cuyo arresto provocó la cancelación del concierto que su grupo tenía pendiente anoche en Norwich (este), aseguró que era inocente y que la detención había sido un error.
El artista, que en el pasado admitió abiertamente que consume cocaína y heroína, fue detenido como resultado de varias redadas efectuadas en el auditorio Music Hall de Shrewsbury y dos autobuses utilizados por el vocalista en su gira por el Reino Unido.
?Cuando registraron los autobuses, (los agentes) esperaban encontrar drogas por todos sitios, pero no fue así?, explicó el cantante, quien aseguró que había dejado de tomar estupefacientes.
Pese a haber pasado el día en un calabozo, Doherty parecía animado y, nada más salir de la comisaría en la que estuvo recluido, pidió un pitillo a varios periodistas y se acercó a un ?pub? para tomarse una pinta de cerveza Guinness.
Anteriormente, la Policía, que utilizó perros adiestrados durante la operación, había informado del arresto de un hombre -supuestamente Doherty- y una mujer por posesión de drogas duras, al tiempo que los agentes registraron a otras 17 personas.
La mujer, cuya identidad no se ha divulgado, fue puesta en libertad, toda vez que un portavoz policial precisó que durante la operación se requisaron ?varios objetos? que serán analizados, así como una ?cantidad? de droga dura.
Doherty se ha hecho especialmente famoso por su relación sentimental con Kate Moss, que ha sido recientemente objeto de un escándalo después de que un diario publicara fotos en las que aparece esnifando cocaína, junto a su novio y unos amigos.
Hace tres días, el periódico sensacionalista The Sun publicó que Moss, de 31 años, había iniciado un tratamiento de rehabilitación en una clínica de Estados Unidos.
Según aseguraba ese diario, la modelo ha decidido seguir los consejos de su amiga y colega, la australiana Elle MacPherson, quien en 2003 ingresó en el mismo centro para reponerse de una depresión.
Las polémicas fotografías le han salido muy caras a Moss, una de las mujeres más cotizadas en el mundo de las pasarelas, ya que ha perdido lucrativos contratos para desfilar con marcas tan conocidas como Chanel y Burberry.
Tras la publicación de las instantáneas, la propia modelo pidió disculpas, asumió la ?responsabilidad total? de sus acciones y dijo que había dado los pasos necesarios para solucionar el problema.