MÉXICO, DF.- A 48 horas del partido contra Estados Unidos de la eliminatoria mundialista, la Selección Mexicana de futbol se reportó lista para el citado encuentro, donde la mentalidad sólo tiene una palabra: "ganar".
Diversos integrantes del Tri indicaron que hay plena confianza en llevarse los tres puntos y que no piensan tanto en una revancha por la eliminación de México a manos de los estadounidenses en el Mundial de Corea-Japón 2002.
El guardameta Oswaldo Sánchez manifestó: "Este partido nos servirá para ver en dónde estamos, para hacer un análisis de cómo está el equipo. El plantel trabajó muy bien toda esta semana, hay buen ánimo, sólo estamos pensando en ganar y esperemos el domingo sacar una victoria".
Quien será titular del marco tricolor el próximo domingo en el Estadio Azteca afirmó "nosotros estamos preocupados por hacer nuestro futbol. Ricardo La Volpe ya tiene el cuadro que va a utilizar, pero sería injusto de mi parte decir quiénes van a jugar, porque ese no es mi papel, sino el del entrenador".
El guardameta de Chivas del Guadalajara apuntó que ?quienes jueguen lo harán de la mejor manera y los que vayan a la banca seguro van a apoyar".
También el defensa Rafael Márquez aseguró que el equipo mexicano ya está listo para encarar este encuentro del hexagonal final de la Concacaf rumbo al Mundial de Alemania 2006 y que sólo piensan en ganar.
"Me imagino que Estados Unidos va a venir a meterse atrás, va buscar en un contragolpe el error, pero nosotros tenemos que tratar de evitar eso, estar bien protegidos, ser contundentes y tener paciencia, que será muy importante", señaló.
El zaguero del Barcelona de España dijo que no sólo buscarán llevarse los tres puntos, sino agradar a la afición, a la que pidieron paciencia si el gol no cae pronto, pues el cuadro de las barras y las estrellas no se desordena con facilidad.
"Estamos conscientes de que hay que ganar y convencer, el equipo está en muy buena forma, está bien mentalizado, esperamos tener un buen funcionamiento el domingo", apuntó.
A su vez, el delantero Jared Borgetti manifestó que la mentalidad está puesta en el triunfo, "porque el futbol es de las pocas cosas en que le podemos ganar a Estados Unidos y obviamente es algo que queremos hacer notar de la mejor manera".
El autor del gol de la victoria mexicana en el anterior partido de eliminatoria mundialista ante los norteamericanos pidió que ya se olvide la eliminación del Mundial 2002, pero advirtió que la Selección Mexicana buscará con todo la victoria, pues no pueden dejar ir puntos en casa.
Paciencia ante todo necesita la Selección Mexicana para el partido contra Estados Unidos este domingo, pues el esquema del rival será de cazar un error y no de proponer futbol, dijo el delantero del Tri, Jared Borgetti.
En opinión del delantero del Pachuca, el cuadro de "las barras y las estrellas" respeta a México porque si no lo hiciera entonces vendría a jugar abierto, aunque ese no es su estilo.
"Hay mucha rivalidad, creo que más de nosotros hacia ellos por la cuestión de que es un país mejor y por ello sin duda que este partido va más allá, se podría decir que el futbol son de las pocas cosas en las que les podemos ganar y obviamente lo queremos hacer notar", dijo.
Señaló que la eliminación de la Copa del Mundo en Corea-Japón 2002 "ya quedó atrás, eso ya pasó hace tres años y queda sólo para la historia, ahora lo importante es este partido y después del mismo pasar a la historia".
A su consideración México no se ha estancado en su nivel futbolístico, sino los demás países han crecido, "llega un momento en que para las diferentes selecciones es mucho más difícil saltar un escalón que desde el inicio brincar tres y así ha pasado con muchos países".
Estimó que el crecimiento futbolístico del vecino país del Norte se dio "porque es mucho más fácil enseñar a jugar, que después ese alguien que ya sabe hacerlo pedirle la excelencia. Tras admitir que la distancia entre estos dos países se ha acortado, manifestó: "ellos saben que nosotros somos mejores y que podemos ganar".
No debe hablarse en este momento de porqué hay varios jugadores de Estados Unidos en equipos de Europa y sólo un mexicano, "la liga de nosotros es mucho más fuerte que la MLS y aún así con esa diferencia el Tri debe imponerse".
Rafa Márquez asegura que siempre juega entregado con su selección
El mexicano Rafael Márquez, defensa del Barcelona, aseguró ayer que cuando juega con la selección de su país siempre se entrega al máximo y por eso su suspensión en la liga de España no cambiará su actitud el domingo ante Estados Unidos.
Márquez fue expulsado ante el Deportivo de La Coruña en su última aparición con el Barcelona, y cumplirá un partido de castigo, lo cual le permitirá dar el máximo el domingo ante Estados Unidos y el miércoles ante Panamá, sin reservarse para el choque del Barcelona contra el Betis en la trigésima jornada del torneo español.
"De todas formas yo siempre me entrego, suspendido o no", aclaró Márquez, pieza fundamental en el encuentro México-Estados Unidos que pondrá frente a frente a dos de los favoritos del área de la Confederación de Futbol para asistir al próximo mundial.
Márquez reconoció tener una espina clavada porque fue Estados Unidos el que eliminó a México en los octavos de final de la pasada Copa del Mundo, pero confió en la victoria el domingo en el estadio Azteca, donde los estadounidenses nunca han vencido a los mexicanos.
"Estados Unidos se va a plantar atrás en espera de un error de nosotros, van a tratar de dar contragolpes, y debemos estar tranquilos y con mucha paciencia", aseveró el jugador.
Ayer, al terminar la práctica de la Selección Mexicana, Márquez restó importancia al hecho de que Estados Unidos tenga a varios jugadores en las ligas de Inglaterra, Alemania y Francia y dijo que la experiencia que tienen en Europa no le servirá el domingo.
"Son escenarios distintos, en Europa no hay muchos estadios como el Azteca ni tanta euforia en los partidos, no es el mismo clima ni la misma altura sobre el nivel del mar", dijo el zaguero que sí reconoció a los estadounidenses como rivales de calidad.
México y Estados Unidos lideran el hexagonal final de las eliminatorias del Mundial de Alemania 2006, tras imponerse como visitantes en sus primeras apariciones, ante Costa Rica (1-2) y Trinidad y Tobago (1-2), respectivamente.
Horas antes del duelo en el Azteca, hoy Costa Rica recibirá a Panamá y Guatemala a Trinidad y Tobago.
La tercera jornada del hexagonal se disputará el miércoles con los desafíos Panamá-México, Estados Unidos-Guatemala y Trinidad y Tobago-Costa Rica.
De los seis concursantes, los tres primeros obtendrán plaza directa para el Mundial 2006 y el cuarto jugará una repesca con el quinto clasificado de Asia.
