El Pontífice instó a los fieles a "abrir el corazón al Padre" y a "entrar en los sentimientos de Jesús para vivir como cristiano".
Ciudad del Vaticano, (Notimex).- El Papa Benedicto XVI llamó hoy aquí a los fieles a rechazar el poder, la riqueza y el prestigio como valores supremos de la vida y a obedecer a Dios, pues "con nuestra obediencia al Padre seremos libres".
"No hay que considerar el poder, la riqueza y el prestigio como valores superiores de vuestra vida, porque en el fondo no responden a nuestro corazón", subrayó el Pontífice durante la catequesis ofrecida en la tradicional audiencia general de los miércoles.
Al comentar el cántico dedicado a la encarnación de Cristo, Benedicto XVI señaló que "Cristo encarnado y humillado en la muerte más infame, la de la crucifixión, es propuesto como un modelo de vida para el cristiano".
Dijo que Cristo "aún siendo igual a Dios, no usó su dignidad gloriosa y su poder como instrumento de triunfo ó expresión de supremacía" sino que "asumió sin reservas la condición humana, mísera y débil, marcada por el sufrimiento, la pobreza y la fragilidad".
"La de Cristo es una realidad divina en una experiencia auténticamente humana. Es verdaderamente el 'Dios con nosotros'", agregó el máximo jerarca dela Iglesia católica.
Benedicto XVI resaltó que esta elección de Cristo de compartir la condición humana le llevó hasta la muerte, que "no es fruto de un mecanismo oscuro" sino que "nace de la elección de obediencia al proyecto de salvación del Padre".
Tras asegurar que "justo en su pasión y muerte Cristo testimonia su adhesión libre y consciente a la voluntad del Padre", el Papa se dirigió a los fieles presentes y los invitó a seguir los pasos de Cristo ya que "con nuestra obediencia al Padre seremos libres".
El Pontífice instó a los 20 mil fieles presentes en la plaza de San Pedro a "abrir el corazón al Padre" y a "entrar en los sentimientos de Jesús" puesto que "esto sería el ejercicio cotidiano para vivir como cristiano".
Benedicto XVI entró en la plaza de San Pedro a las 10:30 horas locales (08:30 GMT) a bordo del habitual vehículo blanco descapotable y pasó entre los miles de fieles venidos de todo el mundo, entre ellos de México, Puerto Rico, Costa Rica, Honduras y Argentina.