TORREÓN, COAH.- Poco a poco el equipo Vaqueros Laguna completa su plantilla de jugadores camino a la próxima temporada de Liga Mexicana, y ayer tocó el turno de reportar al cubano Adrián ?Duquecito? Hernández, quien se dijo contento por la posibilidad de formar parte de la escuadra naranja.
?Haber llegado a Torreón es como llegar a mi propia casa; cuando uno juega en países latinos es fácil adaptarse a un grupo, a la gente o a la ciudad, prácticamente es igual jugar en Puerto Rico, Venezuela, República Dominicana, Cuba o México, hay una perfecta relación y comunicación entre los peloteros?.
Afirmó ?El Duquecito? no haber estado antes en México, pero sabe perfectamente que se trata de un beisbol muy fuerte, donde se requiere de mucho trabajo para mantenerse en el mismo. Mencionó también que está en excelentes condiciones para buscar un sitio en esta liga, además de tener pleno interés en contribuir para hacer de este equipo una escuadra realmente competitiva, y así llevarla hasta las finales, sin perder de vista que el conseguir el campeonato es el objetivo de todos los equipos involucrados.
Destacó que el beisbol mexicano es sin duda alguna el trampolín para muchos peloteros que buscan llegar por vez primera o regresar a ligas mayores, al contarse con scouts de equipos de Estados Unidos, quienes siempre están al pendiente del desempeño de los peloteros de este circuito.
?El Duquecito?, afirmó que su apodo es por el gran parecido que hay entre él y su primo ?Duque? Hernández, lo cual representa desde luego un gran honor y una responsabilidad, ya que se trata de un pelotero de primer orden, al cual considera su ídolo, por su profesionalismo y calidad humana dentro y fuera del terreno de juego.
Con 29 años de vida (el dos de marzo cumplirá 30), Adrián Hernández recuerda que fue en 2001 cuando firmó un contrato por cuatro años con los Yanquis de Nueva York, equipo con el que cumplió uno de sus sueños, lanzar en el Yankee Stadium, al lado de grandes figuras del beisbol.
Durante ese año se mantuvo tres meses en el primer equipo y después fue enviado a AAA; al siguiente año estuvo dos meses en el primer equipo y volvió a bajar. Así, en 2004 se enroló con Milwaukee, donde estuvo dos meses y medio en el primer equipo y culminó en la sucursal de AAA, para finalmente quedar como agente libre.
Durante la reciente temporada invernal, Adrián jugó en Venezuela con los Cardenales de Lara, donde conoció a Rafael Álvarez, quien militó con Leones de Caracas, al cual le dio gusto volver a encontrar, al arribar ayer a la práctica de su nuevo equipo.
?Tengo personas que trabajan conmigo en Estados Unidos y que tienen buenas relaciones aquí en México, ellos contactaron con el club y finalmente me invitaron para que viniera a jugar en esta ciudad, lo que acepté por considerar que es una buena oportunidad para crecer, siempre hay algo nuevo que aprender y espero sacar provecho de esta opción?.
Al hablar sobre sus cualidades como lanzador, dijo que al paso de los años en el beisbol, se madura y se aprenden cosas muy importantes, entre ellas el hecho de que un pitcher no tiene que ponchar a todos sus rivales, sino dominarlos, algo que él hace bastante bien en una labor de equipo con todo su cuadro.