Buenos Aires, (EFE).- Un joven de 29 años presentó una demanda contra su ex novia porque pocos días antes de contraer matrimonio en la provincia de San Juan, en el oeste de Argentina, le dijo que no quería casarse.
Además de un proceso por daños y perjuicios, el joven quiere recuperar al menos parte de los gastos destinados a la preparación de la boda, a la que estaban invitadas unas 300 personas, aseguró su abogado, Fernando Bueno, a medios de prensa argentinos.
El letrado precisó que la fiesta estaba prevista para el viernes próximo, pero la semana pasada la joven, de 22 años, decidió concluir con un noviazgo de cuatro años.
Ante esta situación, el novio despechado "decidió iniciar una demanda por todos los gastos que le ocasionó llevar adelante durante cinco meses los preparativos de la boda", comentó Bueno.
"Además del gasto material -continuó-, mi cliente vivió una desagradable experiencia ya que tuvo que devolver los regalos a todos los invitados y anunciarles la suspensión de la boda".
El joven, según su abogado, también se había encargado de alquilar una vivienda que sería utilizada como hogar conyugal y de amueblarla completamente.
Fuentes judiciales aseguraron que no existe jurisprudencia sobre un caso como este en el país y que es muy difícil que prospere la demanda, además de señalar que, en el mejor de los casos, la Justicia podría mediar para que los gastos sean absorbidos por ambas partes.
