Internacional Jeffrey Epstein Chile Israel-Palestina Donald Trump Narcotráfico

Los brasileños son desde hoy súbditos del Rey Momo

Los brasileños son desde hoy súbditos del Rey Momo 04/02/2005 17:28 CUL

Río de Janeiro, 4 feb (EFE).- Brasil está desde hoy bajo la batuta del Rey Momo, con multitudinarias fiestas en ciudades como Salvador y Olinda, mientras en Río de Janeiro las escuelas de samba calientan sus tamboriles para los desfiles del domingo y el lunes.

En Salvador, la primera capital brasileña cuyo Carnaval disputa popularidad y fama al de Río de Janeiro, el reinado del Rey Momo comenzó anoche, cuando el ministro de Cultura, el cantautor Gilberto Gil, abrió los seis días de fiestas.

Los desfiles de bandas y comparsas también comenzaron en Olinda y Recife, ciudades que reciben miles de turistas en el Carnaval debido al colorido y la alegría de sus fiestas y a sus ritmos contagiosos como el frevo y el maracatú.

Aunque el Carnaval de Salvador es famoso por su "Axé", un ritmo más comercial, y por sus "Tríos Eléctricos", enormes camiones que cargan potentes altavoces y orquestas y tras los cuales puede bailar cualquier persona, las fiestas fueron abiertas este año por un ritmo desconocido y por tambores procedentes de Africa.

Tras un espectáculo de luces, colores y sonidos, los primeros en desfilar por las calles de la capital del estado de Bahía fueron 30 integrantes de "La Liguére Group", un balé de Senegal que dejó claro el origen africano de varios de los ritmos y los bailes brasileños.

A sus tambores africanos se unieron después los de los grupos afrobrasileños de percusión Ile Aye y Olodum, para dar comienzo a una fiesta que concluirá el Miércoles de Ceniza, con la tradicional protesta de la Archidiócesis de Salvador por la extensión del Carnaval a un día sagrado para los católicos.

"Serán seis días de alegría y fiesta durante los que demostraremos que organizamos el mejor Carnaval del mundo", afirmó el Rey Momo de Salvador, Alexsandro Pereira.

Otros que desde hoy son súbditos del Rey Momo son los habitantes de la pequeña ciudad de Ouro Preto, considerada patrimonio universal de la humanidad por la Unesco y cuyo Carnaval también atrae a miles de turistas, especialmente jóvenes.

Las calles de Ouro Preto, en el estado de Minas Gerais, fueron cerradas este viernes para permitir que tres diferentes comparsas que partieron desde lugares diferentes de la ciudad puedan encontrarse esta noche en la céntrica plaza Tiradentes.

También para la noche de este viernes están programados los primeros desfiles de escuelas de samba por el Sambódromo de Sao Paulo, la mayor ciudad del país y cuyo Carnaval comienza a ganar importancia en todo el país.

Aunque en Río de Janeiro el Carnaval sólo comienza oficialmente mañana, sábado, el Rey Momo recibió las llaves de la ciudad de manos del alcalde este viernes por la tarde tras un desfile por las principales calles de la ciudad.

Como en los carnavales de la década del treinta, el Rey Momo carioca abrió un cortejo en una carroza que tuvo como escoltas tres convertibles de la época, en los que viajaban varios miembros de su "corte" vestidos con disfraces tradicionales.

Río de Janeiro, sin embargo, vive en ambiente de Carnaval desde hace una semana, cuando comenzaron los desfiles de los "blocos", comparsas vecinales animadas por orquestas de percusión y que pululan por toda la ciudad.

La cotidianeidad del centro de la ciudad fue rota en la tarde del jueves, cuando un "bloco" integrado por funcionarios de la Bolsa de Valores mostró que para disfrutar del Carnaval no había que esperar hasta el sábado.

La fiesta en Río de Janeiro tendrá su apogeo entre la noche del domingo y la madrugada del martes, cuando las 14 escuelas de samba del llamado Grupo Especial desfilarán por el Sambódromo.

Los desfiles de estas escuelas, considerados como el mayor espectáculo artístico del mundo al aire libre, son la principal atracción del Carnaval de Río de Janeiro y atraen a miles de turistas cada año.

Cada una de estas gigantescas comparsas, con entre 4.000 y 5.000 músicos, bailarines e integrantes, realiza un desfile de unos 45 minutos que se desarrolla apoyada con disfraces, alegorías, gigantescas carrozas y un samba compuesto para la ocasión. EFE

cm/ed/tg

BSM MUN SCS INF ICX

CUL:CULTURA-ESPECTACULOS,ESPECTACULOS SOC:SOCIEDAD-SALUD,GENTE-CURIOSIDADES

RIO DE JANEIRO (AP) _ Con toda su desnudez y brillo al estilo de Las Vegas, el carnaval brasileño parece ser el tipo de diversión que podría ser ilegal y en al menos un aspecto lo es.

Las escuelas de samba que arrancan este viernes deben mucho de su esplendor a las apuestas ilegales.

Desde hace tiempo es un secreto a voces que el desfile anual de las escuelas de samba en Río --corazón de las fiestas-- es financiado en gran parte por quienes manejan un juego ilegal de lotería conocido aquí como "jogo do bicho" o literalmente "juego de bichos" o animales.

Este año, el vínculo entre ese juego y el carnaval es más revelador que nunca.

La escuela de samba Salgueiro rendirá homenaje en su desfile a dos conocidos "bicheros", como se conoce a los capos del juego. En una gigantesca pantalla de televisión, la escuela mostrará las imágenes de Miro y Maninho, padre e hijo bicheros, que financiaron la Salgueiro hasta sus muertes el año pasado.

"Miro siempre nos apoyó y ahora le estamos pagando su confianza en nosotros", dijo recientemente a periodistas Celino Dias, uno de los dirigentes de la Salgueiro.

La vinculación entre el juego de animales y el carnaval llega también cada noche en una popular telenovela, "Señora Destino", en la que el astro del cine brasileño José Wilker representa a un "bicheiro", Giovanni Improtta.

En la telenovela, Improtta es el gran jefe de una escuela de samba, algo que difícilmente escandalizaría a alguien aquí.

"Todo el mundo sabe que los bicheiros siempre financiaron el carnaval. Es una manera de darse legitimidad en la sociedad", dijo Roberto da Matta, sociólogo y autor tanto de libros sobre el carnaval como sobre el juego de animales.

"El jogo do bicho es la carnavalización del capitalismo", aseguró.

En el juego se escogen varias veces al día series de números, que en el pasado correspondían a figuras de animales. Los brasileños pueden apostar cualquier cantidad y el pago en efectivo para los ganadores es una cuestión de honor para los bicheiros.

La enorme popularidad del juego en las barriadas pobres de Río, o las "favelas", hace que los bicheiros luzcan como benefactores de la comunidad.

Pero los bicheiros tienen un lado oscuro. A lo largo de la última década, más de 100 asesinatos pueden vincularse a ese juego.

Maninho, uno de los bicheiros que será homenajeado por la escuela Salgueiro, murió tras recibir seis impacto de bala en las afueras de club de salud, en un asesinato al estilo de pistoleros a sueldo.

Pero las autoridades insisten que la influencia de los bicheiros es una cosa del pasado.

"Los arreglos financieros de las escuelas de samba hoy en día les da absoluta independencia financiera. La presencia de los llamados "patrones" de una escuela o de otra ya no tiene que ver con el funcionamiento financiero de las escuela", dijo el alcalde de Río, Cesar Maia.

Pudo ser una sorpresa para el gobierno de Dinamarca, que con vergüenza supo de la estrecha vinculación entre el juego de apuestas y la escuela de samba Imperatriz Leopoldinense, a la que otorgaron 189.000 dólares para montar un desfile que conmemorara el bicentenario de Hans Christian Andersen.

Cuando un diario danés reveló que el capo del "jogo do bicho" Luiz Pacheco Drummond, presidente honorario de la Imperatriz, había estado en la cárcel pagando una condena de seis años y que tenía vínculos con el crimen organizado, Dinamarca retiró su apoyo oficial.

Mientras era muy tarde para conseguir la devolución del dinero o cambiar el tema del desfile de la escuela, el príncipe Frederik y la princesa Mary, así como el ministro de Cultura brasileño Gilberto Gil, cancelaron sus planes de asistir a las celebraciones en Río.

Pocos se darán cuenta de sus ausencias.

Cuando el alcalde entregue las llaves de la ciudad al rey Momo el viernes, una nación entera de 182 millones de personas abandonará cualquier vestigio de seriedad y se dedicarán a las fiestas.

El carnaval se celebra de diferentes formas por todo Brasil.

En la ciudad de Salvador, al noreste del país, la gente se lanza a las calles a bailar siguiendo gigantescos camiones que llevan bandas musicales interpretando axé, un estilo de samba con fuerte influencia caribeña.

En Recife y Olinda, poco más al norte, las fiestas son al sonido de maracatú, un ritmo con influencia africana.

Incluso la ciudad más grande de Brasil y su capital financiera, Sao Paulo, tiene su propio desfile de samba, que luce como una copia al carbón del de Río, aunque llama menos la atención.

El principal espectáculo se realiza en el Sambódromo de Río, una suerte de estadio en cuyo pasillo principal desfilan las 14 mayores escuelas de la ciudad el domingo y lunes por la noche. Cada una de esas escuelas está integrada por miles de bailarines, cientos de hombres tocando tambores y rebuscadas carrozas.

Todo el espectáculo se transmite en vivo al país, con los fanáticos apoyando a sus escuelas favoritas con el mismo entusiasmo que normalmente reservan para sus equipos de fútbol.

Las escuelas destinan algo cercano al millón de dólares para desfilar 80 minutos en el Sambódromo e intentar vencer a sus contrincantes y ser declarada la campeona del año, un premio que no da dinero sino el derecho de presumir.

___

En la red:

www.rio.rj.gov.br

Leer más de Internacional

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Internacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 132370

elsiglo.mx