El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- La escena ha sido igual en todos los lugares donde se ha presentado... cuando Margarita Gralia se desprende de su toalla dentro de la puesta en escena El Graduado, en los teatros sólo se escucha un ¡oh! de asombro del público.
Algunas mujeres que ya han visto la obra aseguran que al verla así, tal cual, un abanico de sentimientos recorre su ser: envidia, deseo, ganas de superación y de hacer mucho ejercicio...
Y es que, además de ser reconocida por su excelente desempeño en los escenarios, Gralia ha dejado boquiabiertos a los hombres y mujeres que se percatan de que a sus 50 años posee una figura envidiable y una belleza que cualquier jovencita quisiera; mismas razones que motivaron a los empresarios de la revista Playboy a invitarla a posar en sus páginas el año pasado, causando gran revuelo entre los caballeros.
-¿Usted vino a romper con los patrones de conducta de las mujeres de su edad, al demostrar que no solamente las jóvenes pueden revelar su cuerpo abiertamente?
-Es un tema complejo, no quiero decir ?ay todo el mundo tiene que hacerlo y todo mundo debe mostrar su cuerpo sin inhibiciones?, pero sí creo que sería como lo ideal, pero se tiene que partir de un convencimiento importante, interno, de un trabajo de autoestima y seguridad. Más allá que muestres o no tu cuerpo con total naturalidad, es qué relación tienes tú con tu cuerpo, cómo te sientes, si consideras que es algo bello, importante o si consideras que tiene partes sucias, pecaminosas. Ése es el trabajo que uno tiene que hacer en su mente.
La que habla para El Siglo de Torreón no es Paulina -la de Mirada de Mujer- ni tampoco Gabriela Grimaldi -de la Heredera-, es Margarita la que se sabe bella, pero sobre todo la que se siente plena y libre.
Fue precisamente esa libertad la que la llevó a aceptar aparecer en Playboy en unas fotografías en las que deseaba transmitir la imagen de una mujer segura, pero jamás provocadora, morbosa, y mucho menos ofreciéndose o vendiéndose.
?Simplemente muestro esa alegría de ser mujer, de la plenitud de mi edad, esa alegría de mi sexualidad. El cuerpo no se usa sólo para el sexo, mi cuerpo es el que contiene toda mi vida, mi historia, mis sentimientos, todas las caricias y todos los dolores: un cuerpo no es nada más los genitales... lo vemos (el cuerpo) como un elemento exclusivamente sexual, cuando la sexualidad es un área de nuestra vida, la parte de un todo?.
Pero su existencia no gira alrededor del cuidado de su belleza, Margarita -la que también disfruta la frivolidad del medio y de las alfombras rojas-, está consciente que hay que trabajar en el lado espiritual, el cual cultiva tratando de tener pensamientos y sentimientos positivos e inteligentes, rodeándose de buenas personas, meditando y haciendo ejercicio.
-¿Qué papel juega el dinero en la vida de Margarita Gralia?
-Juega una parte muy importante, lo necesitamos para lograr muchas veces nuestros sueños y objetivos, y además nos da libertad. Creo que la única independencia real que existe es cuando tenemos una independencia económica... también estoy totalmente convencida que si no sabemos qué queremos de nuestra vida no lo podremos comprar con todo el dinero del mundo. Hay gente que tiene mucho dinero y lo gasta y lo gasta y nunca encuentra la felicidad porque no sabe lo que quiere. Entonces si nos sentamos a meditar y a pensar y escuchamos lo que queremos, nos daremos cuenta que muchas veces eso que nos va a hacer tan feliz se obtiene sin dinero.
Los escasos minutos que duró la entrevista se ?pasaron volando?, pero fueron suficientes para saber que Margarita Gralia es feliz aún y que no tiene hijos, es dichosa pese a no vivir en su país de origen (Argentina) y goza la vida aunque no es una quinceañera. De ahí el nombre que elegiría para su autobiografía: Margarita Gralia: una mujer en plenitud.
Se gradúa en Torreón
Luego de sus exitosas presentaciones en Monterrey, Saltillo y otras ciudades del país, esta noche llegará al Teatro Nazas la puesta en escena El Graduado, contando con la actuación especial de Margarita Gralia y Osvaldo Benavides.
En funciones de 19:00 y 21:30 horas, el público lagunero disfrutará esta comedia ligera que relata la odisea sexual de Benjamín (Osvaldo Benavides), un ingenuo estudiante de 21 años recién titulado que es seducido durante su fiesta de graduación por la señora Robinson (Margarita Gralia), una atractiva mujer madura, amiga de los padres del chico que utiliza sus encantos para hacerlo caer... siendo en ese punto donde la historia da un giro inesperado.
Margarita Gralia aseguró que más allá del desnudo que hace en cierta parte de la historia, fue la actuación lo que representó un mayor riesgo para ella, sobre todo por la complejidad de su personaje y porque compartiría el escenario con gente tan joven como Benavides y Paola Núñez (que participara en la telenovela Las Juanas), pero afortunadamente se dio cuenta que son unos jóvenes muy preparados y profesionales.
?La señora Robinson es un personaje muy controversial pero al mismo tiempo muy querido y muy soñado por muchas actrices. Me considero realmente muy privilegiada de que me haya tocado este personaje por eso lo hago con tanta entrega y alegría?, finalizó Gralia.