SUN-AEE
MÉXICO, DF.- La fallecida actriz y conductora de televisión Mariana Levy concedió su última entrevista al programa Sábado Gigante, conducido por Don Francisco.
Semanas antes de su fallecimiento, la actriz y conductora viajó a Miami, Estados Unidos, para platicar sobre su participación en la telenovela Amor Real, aunque también habló sobre aspectos personales:
"Es el mejor momento de mi vida, encontré al hombre que es como mi hada madrina. Cualquier cosa que yo había podido desear, él me la ha cumplido", comentó Mariana Levy al popular conductor chileno.
En el panel de entrevistados, don Francisco también incluyó a la madre de una de las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez.
Al final del programa, Levy también emitió una opinión al respecto:
"Me alarma. Me entristece que se lleven la vida de unas 500 mujeres y nadie haya podido pararlo. Porque una mujer que sea asesinada es suficiente para hacer un escándalo.
"Hay que pensar en esas familias, padres, hermanos. Me alarma que eso crece y que hasta ahora no sucede nada. Pasa el tiempo y uno se pregunta: ?¿Cuántas más vendrán??. ¡Ojalá y ninguna!"
La entrevista fue transmitida en Estados Unidos ayer y el conductor dijo que era en memoria de Mariana Levy, quien murió el viernes pasado a causa de un infarto.
La actriz viajaba en su camioneta rumbo a un parque de diversiones acompañada por sus tres hijos y su marido.
Al intuir que serían víctimas de un asalto, Mariana sufrió una crisis nerviosa que derivó en un ataque al miocardio.
Durante la entrevista con don Francisco celebrada hace un par de semanas, Levy aceptó hablar incluso de su ex marido, el actor Ariel López Padilla, y dijo que su divorcio, "fue la mejor decisión" que pudo tomar.
"Pasado un tiempo, comencé a salir y un día un hombre me dijo que no me tomaba en serio porque era divorciada.
"Allí entendí que tenía una etiqueta de divorciada. Para mucha gente era un estigma y fue doloroso darle esa explicación a mi hija y a mi familia. No fue fácil", recordó la actriz.
Levy expuso que después de su divorcio sufrió una profunda depresión y que luego tuvo que enfrentarse a no tener trabajo y al incendio de su casa durante una Navidad.
"¡Era lo último que me faltaba! Murió mi perra, y me quedé sin nada más que lo que tenía puesto.
"Me di cuenta en ese momento qué era realmente lo importante en mi vida. Tenía a mi hija tomada de mi mano y estaba yo fuerte y entera para partirme y sacarnos adelante.
"Dios me aterrizó ese día, para que me diera cuenta de las cosas importantes y creo que fue como una limpia, pues después de allí dio un giro mi vida y a menos de un año apareció mi marido de ahora", finalizó Mariana.