El País
MADRID, ESPAÑA.- Marilyn Manson, el rey del sexo satánico, se casa con Dita Von Teese, una voluptuosa amante de los encajes y la lencería fina. ¿Cuál de los dos ha perdido la cabeza?
Algunas de las cosas que ha hecho Manson: proclamar, en una de sus canciones, que es el rey del sexo; acostarse con una fan a cambio de algo de droga y un par de zapatos; tener sexo totalmente creyendo que la mujer que tenía debajo era una ballena; proponerle a Avril Lavigne hacer un video erótico; asegurar que sólo respeta a las mujeres dispuestas a practicar la sodomía; y pedirle a su novia, la modelo, stripper y Dita Von Teese, que se case con él en Europa.
Algunas de las cosas que ha hecho Dita Von Teese: aparecer en la portada de Playboy cuando y como le viene en gana; bañarse en enormes vasos de cóctel frotándose con una esponja en forma de aceituna; tener como una de sus principales fuentes de ingresos los stripteases que realiza en fiestas privadas (unos 2,500 euros por número); y aceptar la propuesta de Manson deslizando en su dedo anular un enorme anillo de compromiso.
Por extraño que parezca, que estos dos iconos de la impostura acabaran metidos en una relación sincera es un desenlace perfectamente natural: un anticristo superstar que jamás se deja ver sin caracterizar y una rubia natural teñida de morena que presume de ser del todo artificial estaban hechos para entenderse.
La historia de Dita y Manson (nacidos Heather Sweet y Brian H. Warner, de 32 y 36 años) empezó mucho antes para él. Hacía tres años que Manson se había fijado en Dita (con ningún éxito) cuando le dijo a su manager que, para su próximo video, quería que todas las chicas se parecieran a ella.
El manager, claro, contestó que, para eso, mejor llamar a Dita. Y la llamó. ?Me dejó un mensaje en el contestador, pero no se oía bien?, contaba Dita en la revista británica Pop. ?Pensé que me proponían hacer un vídeo de Hanson (un grupo de pop adolescente)?. Al final, el malentendido se aclaró, Dita no participó en el video (tenía otros compromisos) y Manson empezó a llamarla por teléfono usando la táctica, según se cuenta, de lamentarse por lo mal que le iba con su pareja.
Tuvo suerte: por esa época ella descubrió que su novio la engañaba (?Con una top model que me encantaba. De joven tenía posters suyos por toda la habitación?, dice en Pop). En febrero de 2003 se hizo pública su relación, de la que él ha dicho: ?No buscaba a alguien que pudiera entrar a formar parte de mi imagen, pero creo que no podría haber elegido a nadie mejor si hubiera querido impresionar al mundo. Cosa que no podría importarme menos?. Ella, mientras tanto, asegura que no entiende cómo ha podido estar con alguien que no fuera Manson.
Y nosotros, para hacernos una idea aproximada de cómo es esa relación y en vista de que estos dos no hablan de sus intimidades, echamos mano de la autobiografía de la estrella del porno Jenna Jameson, Private Parts.
Ella también pasó por la cama del anticristo y lo cuenta así: ?Fuimos a su habitación de hotel. Me sorprendió verle desnudo; alto, con aspecto andrógino y cubierto de heridas en distintas fases de cicatrización. Tenía la idea preconcebida de que el sexo sería salvaje, pero fue muy amable y cariñoso. Estuvimos una hora en la bañera y otra en la cama?, cuenta Jeena.
?Pero después me llamaba todos los días, me dejaba mensajes extraños e intentaba darme por detrás demasiado a menudo como para que me sintiera cómoda??.
Desde entonces, el rey del sexo parece haberse aplacado: uno de sus mayores placeres es susurrar suciedades al oído de Dita en los momentos menos oportunos; el hombre del que se decía que se había quitado alguna costilla para poder hacerse felaciones asegura que le da pereza masturbarse y que, si Dita no está, se emborracha para quedarse dormido; y, por si esto parece poco, le pidió matrimonio arrodillándose y cantándole Be My Wife (Sé mi esposa), de Bowie. Cosas de anticristo.