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Martín Huerta/Jaque Mate

Sergio Sarmiento

“La muerte siempre es temprana y no

perdona a ninguno”.

Pedro Calderón de la Barca

En el momento en que redacto este artículo acaban de difundirse las noticias de que se ha encontrado calcinado el helicóptero que transportaba, entre otros, al secretario de Seguridad Pública Federal Ramón Martín Huerta y al comisionado de la Policía Federal Preventiva (PFP) Tomás Valencia Ángeles del campo Marte adyacente a Los Pinos al penal de alta seguridad de La Palma en el municipio mexiquense de Almoloya de Juárez.

Para el momento en que usted lea estas líneas quizá ya haya más información que permita resolver muchas de las incógnitas que tengo en la mente al escribir. Pero en este instante no puedo evitar especular -a pesar de la petición del secretario de Gobernación a no hacerlo- sobre las razones de la caída del helicóptero. ¿Se trató de un simple accidente, como dijo ayer el presidente Vicente Fox, o hubo acaso un atentado?

La pregunta, desafortunadamente, tiene que hacerse. Martín Huerta es un hombre que ocupaba un lugar fundamental en la lucha contra la delincuencia. Sus responsabilidades incluían no sólo la supervisión de la PFP sino la del sistema penitenciario federal. En un momento en que hemos visto ejecuciones de comandantes policíacos en lugares tan disímiles como Nuevo Laredo, Acapulco y Morelia, y en que las bandas de narcotraficantes están trabadas en una verdadera guerra abierta, no podemos darnos el lujo de no sospechar lo peor.

Ramón Martín Huerta era, sin duda, uno de los hombres más cercanos al presidente. Formaba parte de ese reducido grupo que ha acompañado a Vicente Fox desde sus primeras luchas políticas.

Nacido el 24 de enero de 1957, Martín Huerta estudió administración de empresas en la Universidad del Bajío, donde posteriormente dio clases. De 1984 a 1987 -un tiempo en que la estatización de la banca de 1982 y la crisis económica impulsaron a muchos empresarios a ingresar a la política- fue director de la Asociación de Industriales de Guanajuato. Le tocó a Martín Huerta introducir a Fox en la política; él le presentó, de hecho, a Manuel Clouthier, quien lo invitó por primera vez a contender por un cargo de elección popular.

De 1988 a 1991, en la LIV legislatura, Martín Huerta fue diputado federal por el PAN al mismo tiempo que Fox. En 1991 fue coordinador de la primera campaña de Fox al Gobierno de Guanajuato. Cuando tras la renuncia del gobernador electo, el priista Rubén Aguirre, Carlos Medina Plascencia fue designado gobernador, Martín Huerta quedó como secretario particular del gobernador, en parte porque se le consideraba el hombre de confianza de Fox.

Fox fue finalmente electo gobernador de Guanajuato en 1995 y Martín Huerta pasó a ser su secretario de Gobierno. En 1999, cuando dejó Guanajuato para postularse como candidato del PAN a la Presidencia de la República, Martín Huerta quedó como gobernador sustituto. Ya en la Presidencia de Fox, su perenne colaborador fue subsecretario de Gobierno bajo el mando de Santiago Creel. En 2004 ingresó al Gabinete Federal en reemplazo de Alejandro Gertz como secretario de Seguridad Pública.

La confianza que el presidente Fox le mostró a Martín Huerta en este sexenio ha sido enorme. Tanto la Subsecretaría de Gobierno como la Secretaría de Seguridad son cargos cruciales en la administración pública. Cuando Marcelo Ebrard -quien ocupaba en 2004 el cargo de secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal- cuestionó la lenta reacción de la PFP y la Secretaría de Seguridad Pública Federal ante el linchamiento de un grupo de agentes de la PFP en la delegación capitalina de Tláhuac, el presidente Fox destituyó a Ebrard. Esto subraya la importancia que el mandatario le daba al caso, pero también su necesidad de proteger a uno de los funcionarios más cercanos a él.

Si la caída del helicóptero en que viajaba Martín Huerta fue un accidente, será necesario revisar todos los procedimientos de seguridad de estas aeronaves que con tanta frecuencia transportan al presidente y a otros funcionarios importantes. Pero si se trata de un atentado, estaremos ante una declaración de guerra al Estado mexicano.

La muerte de Ramón Martín Huerta puede ser un golpe al corazón de la administración pública federal. En estas circunstancias, determinar si se trata de un accidente o de un atentado es absolutamente indispensable.

MUERTES

Hace apenas unos días fue ejecutado en Morelia, Rogelio Zarazúa, director de Seguridad Pública del Gobierno de Michoacán. Las muertes de comandantes de Fuerzas policíacas se han multiplicado en los últimos tiempos. Esperemos que estas ejecuciones no tengan nada que ver con la caída del helicóptero que causó la muerte del secretario de Seguridad Pública, Ramón Martín Huerta.

Correo electrónico:

sergiosarmiento@todito.com

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