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MÉXICO, DF.- A diferencia de otros países donde el consumo de alcohol es cotidiano pero de manera moderada, en México se bebe con más frecuencia en fines de semana pero en cantidades más grandes, revela el estudio Medidas preventivas para evitar accidentes, de la Fundación de Investigaciones Sociales AC.
En México poco más de 32 millones de personas de 12 a 65 años consumen alcohol. El consumo anual per cápita en esta población es de 2.8 litros en promedio.
Sin embargo, este consumo puede llegar a siete litros en los varones de 18 a 65 años, residentes en áreas urbanas, de acuerdo con la última encuesta realizada por el Consejo Nacional contra las Adicciones.
De acuerdo con el estudio de la Fundación de Investigaciones Sociales, que es apoyada por las empresas Bacardí, Casa Cuervo, Diageo, Grupo Televisa, Allied Domecq, La Madrileña, Tequila Herradura, Pernot Rocard y Möet-Henessy, “los fines de semana es cuando más se consume alcohol en México, lo cual compagina con la aplicación del alcoholímetro, ya que se trata de los días de mayor riesgo”.
En este sentido, refiere que una persona puede llegar a ingerir hasta más de seis copas por día. La gravedad del asunto, señalan especialistas, es que una bebida requiere aproximadamente de una a dos horas para eliminarse y no dar una lectura positiva en el alcoholímetro, aunque esto depende de muchos factores.
Cada 40 minutos se disminuye 0.10 gramos de alcohol por 100 milímetros de sangre.
En este sentido, tomar una copa es seguro; es tolerable sólo si la persona pesa más de 45 kilos; si la persona pesa menos de 45 kilos, dos copas le intoxicarán.
Si alguien pesa más de 45 kilos y bebe dos raciones en dos horas, seguramente no dará positivo en el alcoholímetro. Las tres copas sólo son tolerables si la persona pesa más de 75 kilos. Si las ingiere quien pesa menos, dará positivo en el alcoholímetro.
La misión de la Fundación de Investigaciones Sociales AC., es promover el conocimiento y la responsabilidad respecto de las bebidas con alcohol para una mejor convivencia social. Esta organización es dirigida por Ignacio Ybarra Duperou y entre sus socios fundadores figuraron Emilio Azcárraga Milmo y Nazario S. Ortiz Garza, quienes ya fallecieron.
Para los especialistas, una ingesta de cuatro copas afecta a todos. “Estamos hablando de un periodo de una a dos horas”, explica dicha investigación.
También destaca que los alimentos retrasan la absorción, observándose una ascenso más lento y un pico menos elevado de alcohol en sangre en los sujetos que han tomado alimentos. La absorción es más lenta a partir de las soluciones de baja graduación como la cerveza y el vino, que si se trata de bebidas destiladas.
En el estudio de la Fundación de Investigaciones Sociales AC., la prueba del alcoholímetro es un factor muy importante en la absorción del alcohol y en ella se puede determinar qué tan alto o bajo es su nivel de alcohol en la que dependerá en gran parte los alimentos que haya ingerido la persona.
Asimismo, concluye que el uso del alcoholímetro es una buena medida que reduce el número de accidentes que principalmente se registran los fines de semana en México.