Rodolfo Zamora no soportó que Karina lo dejara y prefirió acabar con la existencia de ambos
Rodolfo Zamora Muñiz, de 36 años de edad, asesinó de tres balazos a su ex pareja y se suicidó con un disparo en la cabeza, quedando inerte a bordo de su camioneta; lo anterior ocurrió ayer a las 9:00 de la mañana a siete kilómetros de esta ciudad capital, sobre la carretera a Parral, luego de que Rodolfo le obstruyó el paso con su vehículo a Karina Martínez Marín, de 32 años, para después bajarse y accionar el arma en contra de la mujer con quien había tenido una relación sentimental.
Originarios del poblado Santa Lucía, a bordo de una camioneta Dodge, tipo Caravan, color azul, de procedencia extranjera, se dirigían a la ciudad de Durango; Karina, manejando, acompañada de su madre Eva Marín Albarrán, y su tía, María Teresa Marín Alabarrán, y al llegar aproximadamente al kilómetro siete de la rúa que conduce de Durango a Parral, fue interceptada por una camioneta, tipo Ranger pick-up, en donde venía Rodolfo.
Karina, al percatarse de la presencia de su ex pareja, con quien había terminado su relación hace más de un mes, no quiso detenerse, pues consideraba que los lazos sentimentales habían terminado y no tenían nada de qué hablar, obligando a Rodolfo a cerrarle al paso, atravesando su camioneta en frente de la de su ex mujer.
De manera inmediata y sin importar que estuvieran pasando muchos carros por esa vialidad, Roberto sacó el arma y desde abajo de la camioneta le disparó en dos ocasiones en el rostro a Karina, y una en el cuello, a la vista de su madre y de su tía, quedando muerta instantáneamente. Posteriormente, el agresor caminó hasta su vehículo con la pistola en la mano y tan pronto lo abordó, se disparó en el parietal derecho, falleciendo en el momento.
Algunos vehículos que pasaban por ahí se detuvieron e intentaron ayudar a las acompañantes de la hoy occisa; sin embargo, la llegada de la Policía Ministerial fue rápida, debido a que a medio kilómetro del lugar se encuentra un puesto de revisión de esa corporación.
Posteriormente arribaron al lugar patrullas del Departamento de Vialidad, Cruz Roja y Protección Civil, pues, a decir de los mismos agentes, se creía que se trataba de un accidente automovilístico.
Al llegar los elementos de Servicios Periciales y del Ministerio Público, de inmediato acordonaron el sitio, evitando que las personas que llegaron a ver el trágico acto se acercaran a los cuerpos y ?contaminaran? laescena del crimen; por su parte, la unidad de Protección Civil se retiró y los paramédicos de la Cruz Roja atendieron a la madre y la tía de Karina, quienes sufrían un ataque de nervios.
Los agentes de Tránsito se quedaron para desviar el caos vial que se ocasionó, pues los carros quedaron atravesados en el carril de circulación de norte a sur.
Los agentes de investigación, al llegar al lugar de los hechos, se encontraron el cuerpo de Roberto en el interior del vehículo, pero con la cabeza colgando hacia afuera, pues la puerta estaba abierta y no pudo sostenerlo, mientras que en la otra camioneta se hallaba, ya sin vida, Karina, y a su lado la madre de ella y su tía, quienes sufrían un shock nervioso por la impresión de los hechos.
La titular de Averiguaciones Previas, Ruth Alemán llegó al lugar citado y habló con las familiares de Karina, quienes se encontraban dentro de la ambulancia de la Cruz Roja, y ellas fueron las que informaron sobre la relación sentimental que existía entre Karina y Roberto.
Después de haber tomado las pruebas y los datos correspondientes, personal del Servicio Médico Forense se dio a la tarea de subir primero el cuerpo de Roberto, quien presentaba gran cantidad de sangre ya coagulada sobre su cuello, y posteriormente depositaron a Karina en el mismo vehículo del Semefo, también con el rostro y nuca bañadas de líquido hemático.
Las personas que se acercaron a presenciar los hechos poco a poco se fueron retirando, al ver que se llevaban los cuerpos y los vehículos implicados; la ambulancia se retiró trasladando a la madre y a la tía de la hoy occisa y al final los elementos de Vialidad restablecieron la circulación vehicular de la zona.
De acuerdo con las primeras investigaciones y a los datos proporcionados por la señora Eva Marín Alabarrán, madre de Karina Martínez Marín, su hija y Rodolfo Zamora Muñiz llevaban una relación sentimental desde hacía casi un año, sólo que en los últimos meses se había tornado conflictiva, por lo que hace casi 30 días se rompió ese compromiso.
Las amenazas de muerte se fueron tornando más continuas en contra de Karina, pues Rodolfo no concebía la idea de vivir sin ella, según lo manifestado por gente cercana a la hoy occisa.
Al parecer, Rodolfo, quien era de actitud explosiva y temperamental, no soportó más la ausencia de su pareja y se propuso a cumplir su amenaza, que si no regresaba con él, la mataría y posteriormente se suicidaría.
La pareja no había tenido descendencia, aunque se desconoce si la mujer, en otra relación anterior, pudo haber procreado a un hijo, pues en la camioneta se apreciaban unas calcomanías haciendo alusión a que iba a bordo una pequeña.
