“La cárcel más incómoda y triste de todas es la pobreza”.
Salvador de Madariaga
La pobreza es sin duda el mayor problema de la sociedad mexicana. A pesar del enorme potencial económico de nuestro país, seguimos siendo una nación fundamentalmente pobre. Lo sorprendente es que, pese a la idea generalizada de que en la última década y media hemos perdido terreno en este campo, las estadísticas señalan lo contrario.
Tengo frente a mí el “Informe de avance 2005” de “Los objetivos de desarrollo del milenio en México” preparado de forma conjunta por las Naciones Unidas y el Gobierno de la República. Si bien no hay duda que México sigue padeciendo indicadores lamentables de pobreza, hay logros importantes en la mayoría de las “metas del milenio”.
Una de las más importantes metas es la reducción a la mitad de la proporción de personas cuyos ingresos son inferiores a un dólar diario entre 1990 y 2015. En este punto el objetivo ya se ha logrado. Medida en términos de poder de compra del peso frente al dólar, para eliminar las distorsiones de las fluctuaciones en la tasa de cambio, la cifra pasó de 10.8 por ciento de la población en 1989 a 4.1 por ciento en 2003. La caída es todavía mayor si consideramos que en 1998 el país, afectado todavía por la crisis de 1995-1995, llegó a tener a 13.2 por ciento de la población por debajo de la cifra de un dólar al día.
Otros indicadores señalan también que la última década y media no ha sido un tiempo perdido. El número de menores con bajo peso bajó de 14.2 a 7.6 por ciento del total entre 1988 y 1999. La población que vive por debajo del nivel mínimo de consumo de energía alimentaria, por otra parte, se redujo de 2.5 a 2.1 por ciento entre 1990 y 2002.
Una meta del milenio para México es lograr que en 2015 todos los niños y las niñas terminen un ciclo completo de enseñanza primaria. En este sentido se han conseguido también grandes avances. La tasa neta de matriculación en primaria para niños de seis a once años de edad pasó de 95.6 a 99.4 por ciento entre 1990 y 2003. La eficiencia terminal de la instrucción primaria subió de 70.1 a 89.3 por ciento.
En el esfuerzo por erradicar los males de la pobreza extrema son especialmente importantes las metas para combatir la mortalidad infantil. No se ha logrado cabalmente la meta del milenio, que era reducir en dos terceras partes la mortalidad infantil entre 1990 y 2015, pero en parte esto se debe a que México contaba ya en 1990 con una mortalidad infantil relativamente baja para un país pobre. En 1990 en México se registraban 44.2 defunciones de niños menores de cinco años por cada mil nacimientos. Para el 2003 la cifra había bajado a 25.
En algunas de las enfermedades que más inciden sobre la pobreza, México ha logrado también logros significativos. El número de casos de paludismo (o malaria) por cada 100 mil habitantes ha bajado espectacularmente de 53.3 en 1990 a 3.7 en 2003. Si bien la incidencia de tuberculosis ha bajado poco, de 17.3 a 16.7 por cada mil habitantes, la mortalidad por esta enfermedad ha descendido de 7.5 a 3.2 por millar de personas.
México está también avanzando en la meta de incorporar las nuevas tecnologías de información y de comunicaciones. El número de líneas de teléfono por cada mil habitantes ha pasado de 64 en 1990 a 170 en 2003. En 1995 México tenía 25 computadoras por cada mil habitantes, pero para 2003 esta cifra ya ascendía a 82. El número de mexicanos con al menos algún acceso a Internet ha subido de 94 mil en 1995 a 14 millones en 2003.
Toda cifra que muestre una mejoría en los índices sociales de nuestro país será, en automático, objeto de cuestionamiento, como lo hemos visto en el caso de la disminución en el número de pobres. Pero quizá valga la pena señalar que las Naciones Unidas, con el propósito de medir el avance de todos los países en el logro de las metas del milenio, han supervisado la compilación de las cifras que yo he citado.
La pobreza de un país no se elimina a fuerza de estadísticas. Pero las que se utilizaban en el pasado para evidenciar las enormes carencias de México son las que hoy muestran mejorías. Muchos de estos logros, por otra parte, son producto de programas gubernamentales. El Estado mexicano, al disminuir los subsidios generalizados y enfocar sus pocos recursos a programas de salud y de combate directo a la pobreza, ha tenido mayor éxito que nunca en este esfuerzo fundamental.
NOTICIAS DE OAXACA
Cientos de personas, movilizadas por un líder de la CROC al parecer a instancias del gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, bloquearon este viernes pasado las instalaciones de Noticias de Oaxaca, el principal periódico de ese estado. La acción se produce días después que la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió una recomendación al Gobierno oaxaqueño para dejar de hostigar al periódico.
