NUEVA YORK, EU.- Los Mets y los Yanquis presentaron ayer oficialmente al puertorriqueño Carlos Beltrán y a Randy Johnson, quienes llegaron a Nueva York, tras millonarias contrataciones, para la próxima temporada en el beisbol de las Grandes Ligas.
Los Mets presentaron primero a Beltrán, quien será su nuevo jardinero central, y después los Yanquis hicieron lo propio con el lanzador zurdo Johnson.
Beltrán dejó a los Astros de Houston y firmó un contrato de siete años por 119 millones de dólares, con lo cual se convirtió en uno de los cuatro jugadores mejor remunerados en la historia de las Grandes Ligas.
?Me siento orgulloso de ser parte de esta nueva familia, los nuevos Mets?, dijo Beltrán al ser presentado en el Shea Stadium ante los medios de comunicación.
?Los llamo los ?nuevos? Mets porque esta organización va en una nueva dirección, la dirección correcta, la dirección del triunfo?, explicó el jugador, de 27 años, en declaraciones publicadas en el sitio de las Grandes Ligas en Internet.
Beltrán, quien se suma así a un plantel que también cuenta para la próxima campaña con el lanzador dominicano Pedro Martínez -tres veces ganador del premio Cy Young- tuvo una gran actuación en la postemporada pasada con los Astros, cuando bateó .435, con ocho jonrones y 14 carreras impulsadas.
Pocas horas después, en el Bronx, los Yanquis presentaron a Johnson, quien se integra como abridor al cuerpo de lanzadores de ?los Mulos de Manhattan?.
El lanzador estadounidense, proveniente de Arizona y que arregló una extensión por dos años y 32 millones de dólares en su contrato, ya había ocupado los titulares de los medios de prensa en la Gran Manzana tras un altercado que tuvo el lunes con un camarógrafo.
?Mi comportamiento ante la situación de ayer fue poco profesional y obviamente fue algo muy tonto en este momento tan importante de mi carrera?, se lamentó Johnson. ?Por eso estoy aquí ante ustedes y me disculpo por mis acciones?.
Los poderosos Yanquis y su dueño, George Steinbrenner, buscaron denodadamente contar con los servicios del zurdo, de 41 años, con la idea de arrebatarle esta temporada el título de la Serie Mundial a sus archirrivales, los Medias Rojas de Boston, quienes los derrotaron el año pasado en una memorable serie a siete partidos después de ir perdiendo por tres juegos a cero.