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MÉXICO, DF.- El presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Manuel Espino, declaró que la derrota de su partido en los comicios del domingo en el Estado de México y Nayarit “no son ni una catástrofe ni una debacle”.
En conferencia de prensa aseguró que lo ocurrido en el Estado de México fue la “consecuencia natural de desatenciones que por años han ocurrido en el partido”.
Sin embargo, Espino Barrientos, asumió parte de la responsabilidad en dichas derrotas, y agregó que por ello se emprenderá una revisión más exigente y rigurosa de los procesos internos del partido y de su manera de realizar campañas, así como de elegir candidato.
Dijo que el partido blanquiazul reconoce que les fue mal el domingo, pero también pidió no escatimarle a este partido los avances que ha tenido en diversos procesos electorales a nivel municipal.
Dijo que entre las cosas que habrán de revisarse se encuentran los procesos de selección de candidatos a diputados federales y senadores para el año 2006.
Sobre Santiago Creel dijo que el PAN no tiene temor de perder la elección presidencial en 2006, luego de la derrota que sufrieron sus candidatos a las gubernaturas de Estado de México y Nayarit.
El aspirante a la candidatura del PAN a la Presidencia de la República desestimó el retroceso electoral de su partido, pues dijo que “empezamos con ocho gubernaturas y llevamos diez”.
El también aspirante del blanquiazul, Felipe Calderón, destacó por su parte que: “es un momento clave para que el PAN se ponga las pilas”, tras señalar que las derrotas los ponen en una situación “delicada”.
Es necesario, indicó Calderón, un replanteamiento de fondo del partido, volver a sus valores y principios y reconsiderar su forma de hacer política.